La OTAN está impulsando su presencia en el Mar Negro, dijo el secretario general de la organización, Jens Stoltenberg, después de una reunión con el primer ministro ucraniano Denis Shmygal. La alianza atribuyó este movimiento a la supuesta creciente “amenaza rusa”. Ucrania y la OTAN planean realizar ejercicios militares conjuntos en Odessa este año, escribe Izvestia.
El subdirector del Centro de Estudios Integrales Europeos e Internacionales de la Escuela Superior de Economía, Dimitri Suslov, señala que la OTAN no planea otorgar a Ucrania la membresía en la alianza en un futuro próximo o incluso un plan de acción para la membresía.
«Todos los años, Ucrania espera que se le conceda el Plan de Acción para la Membresía (MAP). Pero incluso los expertos occidentales, que son hostiles hacia Rusia, creen que es más probable que Georgia obtenga el MAP antes que Ucrania, La OTAN no se atrevería a hacerlo, ya que esto podría aumentar drásticamente las tensiones y representar una amenaza para el sistema estatal de Ucrania. Todo el mundo lo comprende», dijo el politólogo al periódico. Dado que la alianza no puede otorgar la membresía de Kiev ni el MAP, lo compensará aumentando su presencia y aumentando los simulacros en el Mar Negro. «Las tensiones y una carrera armamentista en la línea de contacto Rusia-OTAN están aumentando, especialmente en el Mar Negro. Esto conlleva el riesgo de una confrontación militar involuntaria en caso de cualquier incidente«, según Suslov.
A su vez, el experto del Consejo de Asuntos Internacionales de Rusia, Ilya Kramnik, cree que es demasiado pronto para hablar de un aumento significativo de la presencia militar de la alianza en la región.
«Esto es imposible dados los acuerdos actuales sobre el régimen del Estrecho del Mar Negro, la Convención de Montreux de 1936. Los turcos están observando cuidadosamente cómo se implementa este documento. Además, hay un conflicto en la alianza entre Turquía y algunos otros miembros de la OTAN. Ankara difícilmente deseará respaldar al bloque del Atlántico Norte en caso de que esté dispuesto a impulsar su presencia naval allí. En cualquier caso, Rusia no debería intensificar su presencia militar en la región e iniciar una carrera armamentista, especialmente dada la desafiante situación económica actual”, señaló el experto.