Según los informes, después de los dos disturbios anteriores a fines de diciembre y principios de enero, cientos de reclusos fueron reubicados del Centro de Justicia de la ciudad de St. Louis.
Los presos de una instalación correccional de St. Louis en Missouri comenzaron una revuelta el sábado, provocando incendios y arrojando escombros a la calle. Los agentes penitenciarios tardaron casi ocho horas en recuperar el control de la situación, informó el canal local KSDK.
Según los informes, los prisioneros pasaron horas arrojando mesas, colchones y otras cosas a las calles, quemando algunos de los objetos.
Algunas ventanas fueron destrozadas por los internos en el piso superior, quienes gritaban y portaban pancartas. Se podía ver un incendio en una ventana rota.
Fires are still being started. The fire department is trying to extinguish them. pic.twitter.com/5tlAopjyWr
— Jasmine Payoute (@jpayoute) February 6, 2021
Según los informes, los disturbios comenzaron por la noche, cuando un oficial de prisiones tuvo una escaramuza con un prisionero y luego fue atacado por otros detenidos. Luego, los presos pudieron abrir sus celdas porque las cerraduras no siempre hacen clic para bloquear.
«A pesar de que nuestro sistema de megafonía automatizado indicaría que las celdas están cerradas, de hecho no lo están, por lo que otros detenidos pudieron salir de sus celdas y entrar en la unidad», se cita al director de Seguridad Pública de St. Louis, Jimmie Edwards, en el informe como diciendo.
Edwards también dijo que los reclusos pudieron entrar al corredor y a una segunda unidad, y agregó que eran «muy violentos y agresivos».
Inmates at St. Louis Justice Center have taken over at least part of the jail. There have been protests over COVID-19 dangers inside. Not sure if this is part of that. pic.twitter.com/roSCtkIHSK
— Doyle Murphy (@DoyleMurphy) February 6, 2021
Para recuperar el control, los agentes penitenciarios utilizaron gases lacrimógenos y volvieron a poner bajo custodia a los 115 reclusos implicados en el motín, ya que los reclusos finalmente cumplieron sus órdenes. Un funcionario agregó que un guardia de seguridad fue atacado en medio del caos.
Los detenidos afirmaron estar cansados de las condiciones de las instalaciones correccionales durante la pandemia de COVID-19, así como de un conjunto de regulaciones que restringieron las visitas y retrasaron los procedimientos judiciales. Los funcionarios dijeron que no había reclusos con coronavirus positivos en la instalación.
La cárcel está ubicada en el cuarto piso del Centro de Justicia, con las únicas ventanas de vidrio que dan a la calle de la ciudad y sin vallas u otros obstáculos alrededor del edificio.