Oficiales de la policía militar rusa, haciendo su servicio en Siria como parte de las fuerzas rusas en el país, practicaron repeler un ataque extremista en la base aérea de Hmeymim y el intento de un enemigo de infiltrarse desde el mar en la base naval de Tartus, ha dicho a los periodistas el Comandante de la Base de Hmeymim, Vitaly Alisevich.
En sus palabras, las unidades de la policía militar, creadas hace diez años, están cumpliendo ahora la más amplia gama de tareas en la República Árabe Siria.
«La policía militar escolta los convoyes y vigila los puestos de control. También se puede utilizar para reforzar a las tropas en caso de un asalto. Hay muchas otras tareas también. Se entrenan constantemente, tanto de día como de noche», dijo Alisevich.
Se han desplegado unidades de la policía militar rusa no solo en Hmeymim y Tartus, sino también en varios puestos militares remotos en diversas partes del país. Realizan patrullas conjuntas con los militares turcos, acompañan a los convoyes de carga, ayudan a distribuir la ayuda humanitaria y supervisan el cumplimiento del alto el fuego.