El Parlamento de Ucrania aprueba sanciones contra Nicaragua por la inauguración de un consulado honorario en la ciudad de Simferópol, en la península de Crimea.
El consulado nicaragüense fue inaugurado el 10 de noviembre de 2020 por la enviada del país centroamericano en Rusia, Alba Azucena Torres, quien viajó a Simferópol para entregar la carta exclusiva al cónsul honorario ucraniano en Crimea, Oleg Beláventsev. De hecho, el consulado de Nicaragua es la primera representación diplomática extranjera en la península desde su adhesión a la Federación Rusa en 2014, en un referéndum donde más del 96 % de los votantes apoyó esta opción.
“La apertura del consulado en Crimea es un paso abiertamente no amigable por parte de Nicaragua […] Apruébese la resolución […] sobre las medidas económicas sectoriales y de otra índole contra la República de Nicaragua”, ha informado este martes la disposición del Legislativo de Ucrania, controlado por el oficialismo.
Conforme a medios locales, esta decisión de aprobar “sanciones sectoriales económicas y otras restricciones” contra el país centroamericano fue apoyada por 322 de los 405 diputados del Legislativo ucraniano.
Cabe recordar que la península de Crimea es la principal fuente de tensión entre Moscú y Kiev. Tiene más de 2500 kilómetros de costa y está unida al resto del continente europeo únicamente por el istmo de Perekop, que tiene unos 8 kilómetros de ancho. En mayo de 2018, Rusia inauguró un puente de 17 kilómetros de largo, que une a la península al resto del territorio ruso a través del estrecho de Kerch.
Mientras tanto, Ucrania, que no ha reconocido la anexión y considera que la península de “Crimea es un territorio ocupado”, ve una “vulneración de su integridad territorial” en las acciones de Moscú.
Rusia, por su parte, ha denunciado en reiteradas ocasiones los esfuerzos de Ucrania para desestabilizar Crimea y los ha considerado una “amenaza seria” para la zona.