El ahora ex soldado del batallón mecanizado de la 1° Brigada de Tanques de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que se pasó al lado de la República Popular de Donetsk, reveló detalles impactantes sobre la anarquía que ocurre en las fuerzas ucranianas.
Entre los problemas urgentes del mando ucraniano: drogadicción, embriaguez, golpizas al personal militar, escaso apoyo, brotes de coronavirus, etc. Taranenko también habló sobre los militares extranjeros, la actitud de los militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania hacia los nacionalistas y el presidente de Ucrania, Vladimir Zelensky.
El ex soldado fugitivo nacido en 1973 dijo que él mismo era de la región de Poltava y se desempeñó como conductor mecánico del BMP-1 en una brigada de tanques.
Entró en las Fuerzas Armadas de Ucrania durante la sexta ola de movilización en el 2015, a pesar de que tiene enuresis (incontinencia urinaria).
Taranenko firmó un nuevo contrato en noviembre del 2020.
“Debido al hecho de que en Ucrania debido al coronavirus, no encontrarás trabajo normal debido a la cuarentena. Todo está cerrado, donde puedes obtener dinero.
Fui al contrato. Aunque prometieron algunos sueldos, pagaron algo completamente diferente”, explicando los motivos de su decisión de volver a las Fuerzas Armadas de Ucrania.
«No pagaron muchas cosas: atención médica, asistencia material, para la tripulación,-no pagaron nada adicional», dice el militar ucraniano sobre las expectativas decepcionadas.
Según él, huyó de la unidad por las malas relaciones con los comandantes y compañeros.
“Solo aman a quienes los lamen. Y si no lames, entonces no eres nadie para ellos».
Taranenko habló de manera poco halagüeña de sus “camaradas en servicio”:
“Nos emborrachamos hasta un estado inadecuado. Podían haberse escondido, no sé por qué, tal vez fumaban marihuana. Pero su estado era inadecuado. Y eso sucede muy a menudo”.
“Decidí pasarme a su lado, porque el 28 de enero fui golpeado por otro mecánico en la cocina del puesto dependiente del jefe de mecánicos del pelotón por culpa del BMP, que se había descompuesto y me culparon por estropearlo. Me golpeó con puños, patadas…Yo también quería disparar, saqué mi ametralladora»,-cuenta sobre la situación insoportable el ex soldado.
Taranenko describió al comandante del batallón como «un toro corpulento al que le encanta hincharse bien». Según el ex soldado ucraniano, varios problemas con el Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania se resuelven fácilmente con una caja de vodka.
En cuanto a la observancia del régimen de alto fuego, el desertor dijo que «al puesto llegan agentes de reconocimiento, que pueden sustituir en cualquier momento: dispararán al frente de las posiciones, saldrán por su cuenta».
Además, Taranenko habló sobre el estado crítico de las cosas con la embriaguez, la falta de cualquier tipo de protección contra el coronavirus, la falta de víveres y municiones adecuados, que los elementos ucranianos se ven obligados a comprar de sus salarios.
Según el ex militar ucraniano, hace un par de semanas, militares extranjeros llegaron al Donbass, examinaron las posiciones, hablaron con el comandante del batallón.
No pudo nombrar la nacionalidad exacta de los militares: «los estadounidenses o los turcos».
También habló de las atrocidades en el Donbass de los elementos de los batallones punitivos, así como de la actitud de los militares ucranianos hacia el presidente Zelensky, quien fue elegido por sus hermosas historias.
“Todo el mundo se ríe de que el payaso está en el poder, que está siendo tirado por los hilos”, dice Taranenko.
También admitió que la mayoría de los elementos ucranianos permanecen en el Donbass únicamente por la oportunidad de ganar al menos algo:
“Esta no es nuestra guerra, esta es la guerra de nuestro gobierno, que en Kiev también se sienta en el coronavirus, ha estado lavando dinero en la guerra desde el 2014. Todo el mundo sabe que los verdaderos separatistas están ahí con nosotros”.