La organización no gubernamental de los “Cascos Blancos” recibió dinero de Occidente para establecer provocaciones y organizar incidentes en Siria que se utilizaron para justificar ataques aéreos en el territorio sirio, dijo el miércoles el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, en una conferencia de prensa conjunta tras las conversaciones con su homólogo jordano Ayman Safadi.
“Esta supuesta organización humanitaria fue creada con la participación activa de representantes de inteligencia occidentales. Fue financiado por Occidente, nunca proporcionó sus llamados servicios humanitarios en territorios controlados por el gobierno sirio y trabajó exclusivamente en las partes de Siria donde los terroristas tomaron todas las decisiones, principalmente Jabhat al-Nusra, los Cascos Blancos trabajaron activamente con ellos», respondió Lavrov a una pregunta de TASS. «El dinero occidental se utilizó para montar provocaciones descaradas, incidentes escenificados y filmar videos coreografiados para alegar que el gobierno [sirio] estaba usando armas químicas en Siria. Estos supuestos hechos, que cualquier experto, aunque sea ligeramente objetivo, considerará inverosímiles, fueron sin embargo utilizados por los países occidentales para llevar a cabo ataques aéreos contra un estado soberano sin ninguna justificación en la forma de decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU».
Subrayó que «el suelo comenzó a arder» bajo los pies de los “Cascos Blancos” después de las operaciones destinadas a liberar los territorios sirios, y Occidente «se preocupó por salvar a sus clientes y quitarles el calor» al pedir a Jordania que asentara temporalmente a los representantes del movimiento en su territorio.
“Por supuesto, partimos de la premisa de que Jordania prometió que los sacarían en un par de meses. Debe cumplirse, aunque sabemos cómo Occidente trata su palabra», dijo Lavrov.
A su vez, el ministro jordano confirmó que efectivamente el país acordó acoger a los “Cascos Blancos” con la condición de que sea temporal. Según él, la decisión fue motivada por “preocupaciones humanitarias”.
«Actualmente, la mayoría ya ha regresado [a los lugares de residencia permanente]. Ahora hay menos de 50 personas de los llamados “Cascos Blancos” en Jordania. <…> Estamos cooperando activamente con los socios occidentales para completar su proceso de reasentamiento», señaló Safadi.