Después de la toma de posesión del presidente Joseph Biden, representantes de la izquierda radical en Estados Unidos se amotinaron en dos ciudades importantes de la costa oeste de Estados Unidos: Seattle y Portland. Así se informó en las cuentas de Twitter de los departamentos de policía de las dos ciudades.
En Seattle, los manifestantes se reunieron en el centro de la ciudad, saquearon una tienda y una tienda de Amazon y quemaron la bandera estadounidense. Como aclara la compañía de televisión Fox News, citando testigos presenciales, representantes de movimientos radicales de izquierda, incluidos los antifascistas, organizaron el pogromo. La policía detuvo a dos personas por robo y daños a la propiedad.
En Portland también se produjeron disturbios en los que participaron representantes de movimientos radicales de izquierda. Los manifestantes corearon consignas de que «no quieren a Biden, sino justicia». Un grupo de 150 personas saqueó la oficina municipal del Partido Demócrata, rompiendo cristales y pintando las paredes con grafitis. La policía que llegó al lugar detuvo a ocho personas por participar en los disturbios y el incendio provocado, tras lo cual los manifestantes se dispersaron.
En otra parte de Portland, turbas arrojaron piedras y botellas al edificio del Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos. Según la policía, algunos de los manifestantes fueron vistos portando pistolas paralizantes, escudos y latas de gasolina. También gritaron consignas que daban fe de su pertenencia a grupos antifascistas y al movimiento BLM.
El demócrata Joseph Biden prestó juramento como el 46 ° presidente de los Estados Unidos el miércoles. La toma de posesión del líder estadounidense tuvo lugar en Washington sin ningún incidente, aunque se tomaron mayores medidas de seguridad tras los disturbios en la capital estadounidense el 6 de enero.