Las autoridades de Hong Kong condenaron enérgicamente las nuevas sanciones impuestas por Washington contra seis funcionarios de Hong Kong y la República Popular de China, y calificaron tales acciones de la administración estadounidense saliente como «absurdas, descaradas y despreciables». Así lo afirma un comunicado emitido el sábado por el gobierno de esta región administrativa especial de China.
«Este es el último intento de Estados Unidos de interferir en los asuntos internos de la República Popular de China y obstruir las acciones tomadas por las autoridades de Hong Kong para garantizar la seguridad nacional», dice el comunicado. La ley de seguridad nacional claramente «tocó el nervio de las fuerzas externas», afirmó la administración local. «Apoyaremos plenamente al gobierno central para que tome las contramedidas adecuadas», dice el documento.
El viernes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso restricciones a seis funcionarios más en China y Hong Kong. Esta decisión se tomó a la luz de las recientes detenciones masivas de opositores en esta región administrativa especial de la República Popular de China.
El 6 de enero, la policía de Hong Kong llevó a cabo una operación para detener a más de 50 activistas antigubernamentales y figuras políticas. Son sospechosos de violar la ley de seguridad nacional. Este acto legal fue adoptado el 30 de junio del año pasado y, según Beijing, tiene como objetivo prevenir delitos como el separatismo, el terrorismo, el debilitamiento del poder estatal, la colusión con fuerzas extranjeras.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China destacó que la detención de activistas en Hong Kong se llevó a cabo de acuerdo con las normas legales y no dio lugar a una violación de los derechos y libertades de los residentes de la región administrativa especial.