El ejército ruso, junto con las agencias de seguridad interna, continúa el proceso de paz en la provincia de Daraa, en el sur de Siria. El éxito de Rusia en la restauración de la estabilidad en la región y la autoridad del gobierno de Bashar al-Assad también son notados por los medios de la oposición.
La situación en la provincia de Dara’a sigue siendo extremadamente tensa. A pesar de que no ha habido guerra aquí durante 2 años, no se puede decir que el sur de Siria esté tan tranquilo como, por ejemplo, Damasco o Alepo.
Según estadísticas citadas por fuentes locales, solo en 2020, hasta 300 personas murieron como resultado de disparos o ataques de grupos de bandidos contra funcionarios de seguridad y civiles en la región. La mayoría de los muertos eran representantes de los servicios de seguridad, soldados del Ejército Árabe Sirio (SAA) o milicias, así como ex militantes que depusieron las armas y volvieron a la vida civil.
En este momento, hay un gran número de ex militantes en Daraa, desertores y solo jóvenes que han huido de las unidades del ejército, que no pueden encontrar trabajo en la provincia o más allá. Según las agencias de seguridad interna sirias, son ellos quienes tienen más probabilidades de convertirse en una «base de personal» para reponer a los grupos armados ilegales.
Para resolver este problema, los representantes del comando ruso celebraron varias reuniones con líderes locales, ancianos y representantes del clero. Como resultado, con la mediación de Rusia, una comisión comenzó a trabajar en la regulación del estado de los ciudadanos de Daraa, que comenzó su trabajo el 1 de diciembre en los suburbios del centro administrativo de la provincia de Daraa al-Balad .
Sin la confianza de la población local en el gobierno, sus unidades de seguridad interna y las fuerzas armadas, el proceso de paz no dará frutos. Esta confianza en las autoridades se logra mediante acciones concretas de Rusia y las autoridades sirias, que también se señalan en fuentes de oposición a Damasco.
Así, la agencia de noticias Eldorar informó que el mando del 1er cuerpo del Ejército Árabe Sirio prometió desalojar las escuelas en algunos asentamientos utilizados para las necesidades del ejército en un futuro próximo y transferirlas a la administración local. Esto se hará específicamente para que los niños y adolescentes de estos pueblos vuelvan a sus estudios.
Además, según el periódico, el representante de las Fuerzas Armadas de Rusia en Damasco, el teniente general Andrei Kolotovkin, durante una reunión con las autoridades de la provincia de Daraa y la región de Daraa al-Balad, prometió que el presidente sirio Bashar al-Assad planea emitir un nuevo decreto de amnistía en un plazo de 2 meses. Según el texto del proyecto de ley, los casos de ex militantes serán considerados a nivel local y muchos de los detenidos pronto serán liberados.
Se espera que todas estas actividades contribuyan a fortalecer la confianza pública en las autoridades. A su vez, Rusia asume que tales reuniones del comando con representantes de la población local y líderes espirituales se volverán regulares y servirán a la causa común de restaurar la estabilidad en el sur de Siria.