Los hutíes, conocidos formalmente como Ansar Allah, anunciaron el 6 de enero que su Fuerza de Defensa Aérea había derribado un avión no tripulado de combate de la coalición liderada por Arabia Saudita.
En un comunicado, el Brigadier-general Yahya Sari, portavoz de los hutíes, dijo que el avión no tripulado, un Karayel de fabricación turca, fue derribado con un misil tierra-aire mientras realizaba «hostilidades» sobre la provincia de al-Jawf, en el norte de Yemen.
“El ataque y el derribo [del dron] fueron documentados por los medios militares”, agregó el portavoz.
El Karayel fue desarrollado por Vestel de Turquía para llevar a cabo misiones de vigilancia, reconocimiento y combate. El dron tiene una duración de hasta 20 horas y un rango operativo de 150 km. El dron se puede armar con municiones guiadas como el MAM-L y MAM-C de fabricación turca.
El año pasado, Arabia Saudita firmó un acuerdo con Vestel para crear una empresa conjunta que produciría 46 drones Karayel durante los próximos 5 años para las fuerzas saudíes.
Los hutíes no proporcionaron detalles sobre el misil utilizado para derribar el Karayel. El grupo opera algunos sistemas de defensa aérea soviéticos mejorados, así como misiles aire-aire que habían sido modificados para ser lanzados desde tierra.
El mes pasado, los hutíes derribaron un avión no tripulado de combate CH-4 de fabricación china de la coalición liderada por Arabia Saudita sobre Ma’rib. Estos incidentes demuestran la creciente capacidad de defensa aérea del grupo yemení.