El nuevo misil Azarakhsh de Irán alcanzó con éxito objetivos de entrenamiento durante las pruebas. Así lo afirmó el contralmirante de la República Islámica, Mahmoud Mousavi.
La nueva arma “aire-aire” se ha desarrollado para vehículos aéreos no tripulados. Equipado con una ojiva que pesa 230 kilogramos, el misil es capaz de identificar y destruir objetivos.
Las pruebas se llevaron a cabo durante un ejercicio militar a gran escala que comenzó en la provincia de Semnan, en el norte de Irán, el 5 de enero del 2020. Las fuerzas terrestres, las unidades de defensa aérea, la fuerza aérea y la marina participan en maniobras conjuntas. La tarea principal de los ejercicios es practicar las acciones del ejército en diversas operaciones de combate.
Está previsto realizar intercepciones aéreas de un vehículo aéreo no tripulado, destrucción de objetos con misiles Azarakhsh, destrucción de objetivos terrestres con bombas y misiles de alta precisión, así como el uso de drones kamikaze.
Según Mousavi, el monitoreo constante de las fronteras con la ayuda de vehículos aéreos no tripulados es uno de los objetivos del ejercicio.
«Hoy, el ejército de la República Islámica de Irán es capaz de dar una respuesta decisiva a cualquier agresión enemiga», dijo el contralmirante.