Los miembros de las tropas de la ONU eran de Burundi y fueron asesinados por combatientes no identificados, dice la ONU.
Tres cascos azules de Burundi fueron asesinados por «combatientes armados no identificados» en la República Centroafricana, informó el viernes (25.12.2020) Naciones Unidas. El anuncio se produjo después de que una coalición rebelde que luchaba contra el gobierno suspendiera un alto el fuego antes de las tensas elecciones generales que se celebrarán el domingo.
«Tres cascos azules de Burundi murieron y otros dos resultaron heridos» tras los ataques contra las tropas de la ONU y las fuerzas de seguridad y defensa nacional de República Centroafricana, dijo la ONU en un comunicado.
Los ataques ocurrieron en Dekoa, prefectura central de Kemo, y en Bakuma, en la prefectura sureña de Mbomou, agregó, sin proporcionar más detalles.
Stéphane Dujarric, portavoz del Secretario General de las Naciones Unidas, condenó enérgicamente el incidente y pidió a las autoridades de la República Centroafricana que investigaran los «atroces» asaltos.
Las elecciones del domingo se consideran una prueba clave de la capacidad del país africano de recuperar la estabilidad.
En la semana anterior al día de la votación, el presidente en ejercicio, Faustin Archange Touadéra, acusó a su predecesor François Bozizé de planear un golpe, una milicia se apoderó brevemente de la cuarta ciudad más grande del país y Rusia y Ruanda enviaron personal militar para ayudar a apuntalar al gobierno.
Rico en minerales pero clasificado como el segundo país más pobre del mundo en el Índice de Desarrollo Humano, la República Centroafricana ha sido crónicamente inestable desde su independencia hace 60 años.