Kosovo deberá celebrar de nuevo comicios legislativos en un plazo de 40 días, decidió el Tribunal Constitucional, que consideró ilegal la elección en junio del primer ministro Avdullah Hoti.
El Tribunal Constitucional de Kosovo dictaminó el lunes 21.12.2020 que se celebren elecciones legislativas anticipadas porque la votación parlamentaria con la que se eligió al actual Gobierno se hizo incumpliendo las leyes.
El alto tribunal estableció que la elección del Gobierno del primer ministro de centroderecha Avdullah Hoti no fue conforme a la legalidad, y pidió a la presidenta interina, Vjosa Osmani, que fije una fecha para las elecciones dentro de un plazo máximo de 40 días.
Según ese fallo, el decisivo voto del diputado Etem Arifi -representante de la minoría ashkalí- no fue legal porque había sido ya condenado a un año de cárcel por fraude, con lo que su mandato como legislador estaba anulado.
Un frágil Gobierno encabezado por la conservadora Liga Democrática de Kosovo (LDK) fue elegido en junio por 61 diputados en una cámara de 120 escaños, después de semanas de disputas legales tras la destitución en marzo del anterior Ejecutivo en una moción de censura.
El jefe de ese Ejecutivo destituido, el ultranacionalista Albin Kurti, presentó una demanda ante el Constitucional exigiendo que se pronunciara sobre si el Gobierno de Hoti había sido elegido de forma legal.
El Ejecutivo de Kurti cayó por una moción de censura a finales de marzo, sólo 51 días después de asumir el poder, por desacuerdos con la LDK sobre la gestión de la pandemia.
Esta decisión del Constitucional hunde a Kosovo más aún en la incertidumbre política después de que en noviembre Hashim Thaci dimitiera como presidente tras confirmarse las acusaciones de crímenes de guerra contra él por parte de un tribunal internacional.
Thaci, antiguo líder de la guerrilla albanokosovar UCK que se enfrentó a Serbia a finales de la década de 1990, dimitió después de que el Tribunal Especial para Kosovo (TEK), con sede en La Haya, confirmara las acusaciones de la fiscalía por delitos de torturas, desapariciones y participación en un centenar de asesinatos entre 1998 y 2000.
Las próximas elecciones serían las cuartas en seis años, en medio de una grave crisis económica por la pandemia, en el que es uno de los países más pobres de Europa.