La Marina de los Estados Unidos adoptará un enfoque más «asertivo» hacia China y Rusia, de acuerdo con la nueva estrategia marítima del país, que dice que las acciones tomadas en la próxima década determinarán la dinámica de poder para el resto del siglo.
Titulado «Ventaja en el mar», el documento, redactado por la Armada, el Cuerpo de Marines y la Guardia Costera, pide una mayor integración de las fuerzas navales estadounidenses para contrarrestar a los «rivales decididos» de Pekín y Moscú. Al describir a las naciones como «las dos amenazas más importantes para esta era de paz y prosperidad global», la estrategia marítima prioriza la competencia con China debido a la «creciente fuerza económica y militar» del país, así como a sus supuestos esfuerzos para «rehacer el orden a su favor.
En cuanto a Rusia, el documento dice que Moscú debe mantenerse bajo control para evitar que persiga una «esfera de influencia ampliada» y «fragmente [ing] el orden internacional existente».
Las fuerzas navales estadounidenses deberían «aceptar riesgos tácticos calculados y adoptar una postura más asertiva en nuestras operaciones diarias» para asegurar una ventaja estratégica a largo plazo sobre ambos «rivales», afirma el plan del Pentágono.
La estrategia advierte que los próximos 10 años serán decisivos para determinar el orden global de los próximos 80 años.
“Estamos en un punto de inflexión”, dice el informe. «Nuestras acciones en esta década darán forma al equilibrio de poder marítimo durante el resto de este siglo».
Washington ha señalado durante mucho tiempo a Moscú y Pekín como las principales amenazas estratégicas al dominio militar estadounidense. Durante el año pasado, la Armada de los Estados Unidos ha intensificado sus actividades en el Mar de China Meridional, sobre el que Beijing ha reclamado su soberanía. China ha advertido en repetidas ocasiones que las incursiones, que según la Marina de los Estados Unidos son necesarias para salvaguardar el tráfico marítimo en la región, podrían desencadenar una peligrosa confrontación.
Estados Unidos ha estado involucrado en enfrentamientos marítimos similares con Rusia. En noviembre, el Ministerio de Defensa de Rusia dijo que un destructor ruso expulsó al USS John S McCain del Mar de Japón después de amenazar con embestir el buque. El Pentágono negó el informe y dijo que McCain se fue por su propia voluntad después de realizar «operaciones normales en aguas internacionales».