La criptomoneda digital del yuan desarrollada por China tiene el potencial de cambiar las reglas del juego cuando se implemente por completo. Al acabar con la dependencia mundial del dólar, se alterará el panorama geopolítico para siempre.
Desde hace varios años, China ha estado desarrollando el yuan digital, la primera criptomoneda de un banco central y un gobierno del mundo. Y está casi terminado.
El minorista en línea chino JD comenzó recientemente a aceptarlo como método de pago, ya que el gobierno prueba su uso otorgando a los ciudadanos un valor de hasta $ 3 millones. También se utilizará para facilitar las transacciones transfronterizas con Hong Kong. Está previsto que se implemente por completo antes de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 en Beijing, que actuará como un escaparate.
Muchos están especulando que esta nueva moneda tendrá ramificaciones globales, y el ejecutivo de Libra de Facebook, David Marcus, señaló que China creará un sistema de moneda digital que puede estar completamente fuera del alcance de las autoridades estadounidenses, lo que significa que las sanciones financieras de Estados Unidos tendrían poco efecto. Añadió que si el yuan digital se adopta ampliamente en todo el mundo, muchos países podrían optar por el renminbi como alternativa al dólar para los servicios internacionales de compensación y liquidación.
Entonces, ¿de qué se trata una «moneda digital» y cómo funciona? El yuan digital será la primera moneda nacional que no existirá en forma física, sino completamente en línea. Si bien las monedas de antaño se basaban tradicionalmente en algo tangible, como el patrón oro, el yuan digital se basa en la ingeniería informática. Esto significa que la forma en que se utiliza y regula difiere de una moneda normal. Una moneda digital es administrada más fácilmente por su gobierno matriz y es más rastreable y observable.
Con una moneda digital controlada por el gobierno, los delitos financieros como el lavado de dinero y la evasión fiscal se vuelven más difíciles. Proporciona mayor seguridad a los usuarios, incluso si reduce la privacidad. Pero aún más sorprendente para los observadores internacionales que las implicaciones para el uso personal es el impacto geopolítico potencial que podría tener.
La aparición de un yuan digital, a diferencia del yuan estándar, es un cambio de juego internacional. Como la primera moneda de este tipo, China tiene el potencial de ser pionera en ella como un nuevo estándar global en sus propias transacciones y, utilizando el músculo económico del país, persuadir a otros países e instituciones financieras para que la utilicen también. El resultado potencial es claro; puede tener un impacto grave en el dólar estadounidense.
En la actualidad, el dólar es la moneda hegemónica del mundo. Es el medio de transacción preferido para muchos sectores y materias primas por igual, sobre todo en el ámbito de las finanzas. Debido a su uso generalizado y al dominio de las instituciones financieras estadounidenses, el gobierno de los Estados Unidos tiene el poder de convertir el dólar en un arma como una forma de «jurisdicción extraterritorial» contra países que no le gustan.
Si Estados Unidos sanciona a una empresa o individuo, efectivamente los separa del sistema financiero global. Los bancos que sirven a estas personas dependen del dólar y, por lo tanto, enfrentan sanciones si violan las sanciones.
Esto es independiente de la política. Tomemos, por ejemplo, a la líder ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, quien fue sancionada por Estados Unidos a principios de este año por supuestamente «socavar» la autonomía de la ciudad. Ahora, no puede poseer una cuenta bancaria porque incluso los bancos alineados con China dependen de los mercados financieros estadounidenses y no la tocarán.
Esto demuestra la fortaleza global del dólar, pero también muestra cómo el yuan digital puede cambiar el panorama actual. La creación de un nuevo medio de transacción internacional significa que las instituciones financieras, las empresas y los gobiernos ahora tienen una nueva vía para hacer negocios sin tener que utilizar transacciones en dólares. Esto reducirá su alcance global. Para países como Irán y Venezuela, fuertemente afectados por las sanciones estadounidenses, es una salida obvia.
Por supuesto, este sistema tendrá una respuesta mixta en todo el mundo. Si bien es beneficioso para algunos países, es inevitable que otros no acepten que sus sistemas financieros sean reescritos y dominados por China.
El yuan digital enfrentará la resistencia política de los EE. UU., Que probablemente responderá creando eventualmente una moneda digital propia (a pesar de que está muy por detrás en la actualidad). También es probable que la Unión Europea avance hacia un «euro digital» para salvaguardar sus propios intereses.
Por otro lado, se debería esperar que el yuan digital gane tracción en países fuertemente integrados con China, particularmente en Asia, África y América Latina. Hay muchas naciones que verán la oportunidad de diversificarse del dólar estadounidense como un desarrollo positivo.
Y así, posiblemente, el aumento del yuan digital demostrará ser una innovación que realmente acelerará un mundo multipolar. Tiene el potencial de romper efectivamente el monopolio del dólar como arma unilateral y extraterritorial y reescribir las reglas del sistema financiero global de una manera que será moldeada por China. También podría desencadenar una carrera de divisas digitales con muchas otras potencias importantes, fragmentando el orden existente en el que el dólar estadounidense sirve como el punto más vulnerable de todas las cosas.
La revolución digital sin efectivo está en camino, y aunque hasta ahora Occidente no ha logrado idear ningún esquema comparable, el de China ya está casi en la línea de meta.