Estados Unidos está masacrando a civiles yemeníes para ‘mantener en funcionamiento las fábricas de armas’, afirma un importante líder hutí

Un líder hutí de alto rango acusó a Estados Unidos de participar en la matanza de civiles yemeníes para garantizar la longevidad de su industria de defensa, y agregó que Washington es la «fuente» de violencia en el país.

Mohammed Ali al-Houthi, primo del líder del movimiento hutí y presidente del Comité Revolucionario Supremo de Yemen, emitió una dura condena al apoyo estadounidense a la invasión de Yemen encabezada por Arabia Saudita hace cinco años y medio. 

Estados Unidos sigue matando al pueblo yemení para mantener en funcionamiento las fábricas de armas, reducir el desempleo y pagar deudas a cambio del dinero del Golfo.

 Acusó a Washington de implementar los planes del «enemigo israelí» y agregó que Estados Unidos es la «fuente de asesinatos» en Yemen. 

El funcionario hutí dijo que se estaban utilizando armas estadounidenses para llevar a cabo «masacres» y que la gente de Yemen «se despierta con los sonidos de las explosiones de bombas estadounidenses» que matan a «niños, mujeres y ancianos».

Una coalición liderada por Riad lanzó una intervención militar en Yemen en marzo de 2015, después de que los hutíes tomaran el poder. La guerra civil estalló en Yemen a finales de 2014, cuando la milicia hutí respaldada por Irán obligó al gobierno del presidente Abd-Rabbu Mansour Hadi a abandonar la capital, Sanaa. La coalición liderada por Arabia Saudita intervino para apoyar al gobierno de Hadi. 

La campaña de bombardeos saudíes y su bloqueo naval han asestado un duro golpe a la población civil, complicando enormemente un brote de cólera mortal y empujando a miles de familias al borde de la hambruna. Más de 100.000 personas han muerto en el conflicto, y la ONU y otras organizaciones internacionales describen la guerra como una de las peores catástrofes humanitarias de los últimos tiempos. 

La administración Trump no se ha disculpado por las ventas de armas de Estados Unidos a Arabia Saudita y otros estados del Golfo que libran una guerra en Yemen. El presidente de Estados Unidos ha promovido los acuerdos como uno de los principales creadores de empleo para Estados Unidos, aunque ha sido acusado de inflar enormemente la cantidad de puestos de trabajo que esos acuerdos realmente crean. 

El año pasado, Trump utilizó su poder de veto para impulsar las ventas de armas a Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos por valor de 8.100 millones de dólares, argumentando que los intentos del Congreso de bloquear los acuerdos «debilitarían la competitividad global de Estados Unidos».

Fuente