Rusia considera como “agresión política” el llamado de EE.UU. a Alemania para declarar una “moratoria” en la construcción del gasoducto Nord Stream 2.
El sábado, Robin Quinville, la embajadora interina de Estados Unidos en Berlín (capital germana), llamó a Alemania y a la Unión Europea (UE) a una “moratoria” para proseguir la construcción del gasoducto Nord Stream 2.
“Este gasoducto no es solamente un proyecto económico, sino también un instrumento político del Kremlin para dejar de lado a Ucrania y dividir a Europa”, espetó la embajadora.
“No importa cuándo o dónde esté, no importa qué acuerdos lo legitimen, un oleoducto ruso ha provocado la misma reacción de Estados Unidos durante décadas: agresión política y resistencia ilegal”, reaccionó María Zajárova, portavoz de la Cancillería de Rusia.
En un mensaje publicado el mismo sábado en su cuenta en Facebook, Zajárova hizo alusión a un artículo publicado en 2014 por el diario The Washington Times, llamado ‘la Administración Reagan advirtió que el gasoducto ruso a través de Ucrania debilitaría al Occidente’.
“El artículo dice: En un memorando a la Casa Blanca en julio de 1981, los asesores de la Administración Ronald Reagan [1981-1989] instaron a la oposición a un nuevo oleoducto desde las regiones ricas en petróleo y gas de Rusia hacia Europa, advirtiendo que esto debilitaría la mano negociadora del Occidente”, explicó la funcionaria rusa. “Entonces hay una dicotomía”, señaló.
El gasoducto Nord Stream 2 es un megaproyecto promovido por Moscú y Berlín, que permitiría a Rusia proveer a Alemania de gas a través del mar Báltico. EE.UU. se opone a dicho proyecto, afirmando que aumentaría enormemente la influencia del país euroasiático en Europa en un momento de creciente tensión entre ambas potencias