Según la información publicada por la agencia de prensa rusa TASS el 4 de diciembre, el portaaviones ruso Almirante Kuznetsov estará listo para regresar al mar y para someterse a pruebas en el mar en 2022 después del incendio ocurrido a bordo del portaaviones en diciembre de 2019.
Una fuente de la industria de la construcción naval dijo: “El próximo verano, el Almirante Kuznetsov será atracado de nuevo en el puerto y se le pondrá a prueba en el mar, es decir, en 2022”.
El portaaviones pesado Proyecto 11435, Almirante Kuznetsov, entró en servicio en la marina rusa en 1990. El diseño de la clase Almirante Kuznetsov implica una misión diferente a la de los portaaviones de la marina de Estados Unidos. El término utilizado por sus constructores para describir los buques rusos es Tyazholyy Avianesushchiy Kreyser (TAVKR) – “crucero portaaviones pesado” – destinado a apoyar y defender submarinos estratégicos portadores de misiles, buques de superficie y aviones navales portadores de misiles de la marina rusa.
El portaaviones Almirante Kuznetsov tiene una superficie de cubierta de vuelo de 14.700 m2 y utiliza la tecnología de salto de esquí para ayudar a la aeronave durante el despegue. El buque puede transportar aviones de ala fija y de ala giratoria, incluidos 18 aviones de combate bimotores Su-33, 6 aviones de combate multipropósito MiG-29K para todo tipo de clima, cuatro helicópteros navales Kamov Ka-31 y dos helicópteros navales Ka-27. La cabina de vuelo está equipada con cables de protección. Dos elevadores de estribor transportan la aeronave desde el hangar hasta la cubierta de vuelo. La nave tiene una tripulación de 1.690 marineros y un grupo aéreo que incluye 626 personas.
El portaaviones Almirante Kuznetsov está armado con 6 AK-630 mm CIWS (Close-In Weapon Systems), ocho CADS-N-1 Kashtan CIWS, cada uno equipado con 2 misiles tierra-aire Gatling AA de 30 mm y 32 3K87 Kortik, doce misiles de crucero antibuque P-700 Granit SSM, 24 × 8 células 3K95 Kinzhal VLS (Vertical Launching Systems) para misiles tierra-aire y lanzadores de cohetes antisubmarinos RBU-12000 UDAV-1 ASW.
Se alimenta de ocho calderas turbo presurizadas y cuatro turbinas de vapor, cada una de las cuales produce 50.000 hp, nueve turbogeneradores de 2.011 hp (1.500 kW), seis generadores diésel de 2.011 hp (1.500 kW) que accionan cuatro ejes con hélices de paso fijo. Puede alcanzar una velocidad máxima de 29 nudos (33 mph; 54 km/h) con un rango de crucero máximo de 8.500 nmi. (15.700 km) a 18 nudos (21 mph; 33 km/h). El portaaviones tiene una autonomía de 45 días.