Robles denuncia la “gran cobardía” de quienes se amparan en su condición de exmilitares para implicar al Rey o mancillar la imagen del Ejército.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha remitido a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid el contenido del chat de la XIX promoción de la Academia General del Aire, “por si los hechos en ella reflejados fueran constitutivos de delito, cometido por personas que además pudieran atribuirse la condición de militares en activo, sin serlo”, según ha informado su departamento. La ministra acompaña el escrito con la información publicada este miércoles por el digital Infolibre, que incluía frases como: “No queda más remedio que empezar a fusilar a 26 millones de hijos de puta” o “qué pena no estar en activo para desviar un vuelo caliente [con armamento real] de [el campo de tiro de] las Bárdenas a la casa sede de esos hijos de puta”, en alusión a la Asamblea Nacional de Cataluña, atribuidas al general de división Francisco Beca Casanova y al coronel Andrés González Espinar, respectivamente.
La ministra subraya en su escrito que “corresponde al Ministerio Fiscal investigar su eventual relevancia penal, en defensa de la legalidad”, así como “salvaguardar la honorabilidad y la pública estimación de las Fuerzas Armadas y de los hombres y mujeres que las integran, volcados en el cumplimiento de las funciones que establece el art. 8 de la Constitución”.
Los participantes en este chat son firmantes de una las cartas que militares retirados han enviado al Rey, cargando contra el “Gobierno socialcomunista”. El objetivo de sus promotores era provocar una cascada de misivas similares con la que presionar al jefe del Estado. Primero fueron 39 jefes y oficiales retirados de la XIX promoción de la Academia General del Aire (AGA) los que el 10 de noviembre remitieron una misiva a La Zarzuela; y luego les siguieron 73 miembros de la XXIII promoción de la Academia General Militar (AGM) el día 25. El plan era que a la iniciativa se fueran sumando otras promociones de militares y ya se habían celebrado contactos con la XX del Aire, la siguiente a la suya, y con veteranos de la Escuela Naval Militar para provocar un pronunciamiento similar en la Armada.
También se ha referido a la carta enviada al Rey por militares retirados asegurando que, “si unos señores franquistas piensan que rodeando de franquismo al jefe del Estado le están haciendo un favor, creo que no entienden que esto contribuya a que cada vez haya más españoles que se sientan republicanos”. El vicepresidente considera la misiva sitúa al Monarca en una situación “absurdamente incómoda” y ha asegurado que no tiene la más “mínima duda” de que ni siquiera la va a leer.