El presidente electo de Bolivia promete el retorno de la democracia después del gobierno ‘de facto’, que recurrió al “golpe de Estado” para tomar el poder.
Durante su intervención en su toma de posición en la Asamblea Legislativa Plurinacional del país en La Paz (capital administrativa), Luis Arce ha prometido este domingo que establecerá un sistema de poder equilibrado y que se trabajará por la reconstrucción de la patria, a fin de rectificar lo que estuvo mal y continuar lo que estuvo bien.
En alusión al gobierno de facto, presidido por Jeanine Áñez, Arce ha criticado que sectores minoritarios levanten la bandera de la democracia solo cuando les conviene, y cuando no, recurren a la desestabilización, la violencia y los golpes de Estado para hacerse con el poder.
En este sentido, ha condenado la “persecución” y el uso de la “violencia” durante el gobierno de facto y ha aseverado que el pueblo boliviano ha votado al Movimiento al Socialismo (MAS) para la paz.
Arce ha señalado que, pese a la violencia desde el gobierno de facto y los grupos paramilitares, obtuvo una histórica victoria en las urnas, con más del 55 %. “Somos mayoría”.