Al menos siete personas murieron, entre ellas dos niños, y 35 personas siguen desaparecidas en un deslizamiento de tierra que sepultó unas 60 viviendas en la localidad de Nejapa, cerca de San Salvador, el viernes.
Las imágenes muestran el daño causado por el deslizamiento de tierra, a los servicios de emergencia que transportan a las víctimas y buscan sobrevivientes en el sitio, así como a los residentes que buscan sus pertenencias entre los escombros.
El deslizamiento de tierra, causado por las fuertes lluvias de las últimas horas, tiene una longitud de unos cuatro kilómetros.
El ministro del Interior salvadoreño, Mario Durán, acudió al lugar y denunció la precaria situación de «necesidad» de las víctimas, que las obligaba a vivir en quebradas y ríos con riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra en caso de fuertes lluvias. Culpó a los gobiernos anteriores de lo sucedido, ya que «nunca tuvieron la intención de ayudar a esta gente».
Las autoridades también informaron que los esfuerzos de rescate continuarán durante las próximas horas, ya que persiste la posibilidad de encontrar personas con vida.