Rossiyskaya Gazeta mantuvo una entrevista con el profesor Sergey Balakhonov, director del Instituto de Investigación Anti plagas de Irkutsk de Siberia y el Lejano Oriente, en la que planteó al experto ruso algunas preguntas candentes sobre la vacuna rusa contra el COVID-19.
El periódico le preguntó a Balakhonov por qué se necesitan varias vacunas contra el virus.
«La vacunación preventiva contra el COVID-19 es definitivamente necesaria durante la pandemia. Y diversos enfoques de investigación sobre este tema son una práctica mundial. No sabemos qué plataforma será la más efectiva, segura y accesible para la población, [solo] el ensayo la mostrará», explicó el experto.
El periódico preguntó al investigador cuánto tiempo probablemente durarían los anticuerpos desarrollados después de una vacuna.
«Las vacunas masivas que se utilizan en este momento han sido bien investigadas durante un tiempo. El período de sus propiedades protectoras ha sido determinado por ensayos y muchos años de uso. Lo mismo sucederá con las vacunas SARS-CoV-2. Siguiendo los resultados de los ensayos con voluntarios, se determinará el período de inmunidad. Estos períodos pueden ser muy diferentes. Por ejemplo, una vacuna contra la viruela se usa una vez y «funciona» de por vida. Una vacuna contra el tétanos también se usa una vez durante la infancia y luego la revacunación se lleva a cabo una vez cada diez años cuando una persona alcanza la edad adulta», informó Balakhonov.
Cuando se le preguntó si es posible repetir la infección por COVID-19, el profesor señaló que la investigación realizada en la región de Irkutsk no ha mostrado tales casos.
«Al mismo tiempo, hemos verificado los datos de que un alto recuento de inmunidad formado después del COVID-19 se puede determinar 5-6 meses después. Esto es motivo de optimismo. El estudio del coronavirus continúa», afirmó.