El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció hoy un ataque perpetrado con armamento de alto calibre contra la refinería de Amuay, en el estado de Falcón, con el objetivo de sabotear sus operaciones.
Durante una rueda de prensa el mandatario informó sobre el avance de las investigaciones para determinar el tipo de arma empleada en la agresión, cuyo objetivo era provocar una explosión importante en las instalaciones, dijo.
‘Derribaron una torre con un nivel de espesor en sus aceros superior a un tanque de guerra’, precisó el jefe de Estado.
Maduro anunció además la reciente captura de dos ciudadanos extranjeros en el estado Zulia, a quienes responsabilizó de supuestos planes para asesinar a líderes de la Revolución bolivariana, vinculados a sectores violentos de la oposición extremista.
Agregó que Venezuela enfrenta una conspiración permanente avalada y financiada por Estados Unidos, en complicidad de varios gobiernos de Europa, como parte de la política para un cambio de régimen en la nación sudamericana.
Asimismo, el mandatario reiteró la denuncia sobre la existencia de campamentos en Colombia donde se preparan alrededor de mil mercenarios para perpetrar acciones terroristas en territorio venezolano.
Ante estas amenazas, Maduro ratificó el permanente despliegue de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana en operaciones de inteligencia y patrullaje para garantizar la defensa de la soberanía y la integridad territorial del país.