El presidente ruso Vladimir Putin continúa su política de «desescalada multifacética», dijo el lunes el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, al comentar sobre la nueva iniciativa del líder ruso en la esfera del control de armas. Putin ofreció un trato a la OTAN: Rusia está dispuesta a no desplegar misiles de alcance intermedio y corto en el territorio europeo del país, junto con armas cuyos parámetros y clasificación han sido una controversia entre las dos partes. Sin embargo, la OTAN debería aceptar introducir una moratoria recíproca, informa Kommersant.
Las medidas de verificación podrían incluir los sistemas Aegis Ashore equipados con lanzadores Mk 41 en bases estadounidenses y de la OTAN en Europa y los misiles 9M729 en instalaciones militares rusas en la región de Kaliningrado.
Fuentes entre los funcionarios rusos informaron a Kommersant que la iniciativa de Putin había estado en proceso durante mucho tiempo, sin embargo, «adquirió relevancia adicional» en este momento. El presidente ruso señaló que la oferta no solo afecta a Europa, sino también a la región de Asia-Pacífico.
«La OTAN formuló su postura hace mucho tiempo: el misil 9M729 debería eliminarse. Sin embargo, incluso si Rusia estuviera dispuesta a considerar ese paso, no está claro cómo se podría hacer», dijo al periódico el investigador principal del Instituto de las Naciones Unidas para la Investigación del Desarme, Pavel Podvig. Por otro lado, señala el experto, si ambas partes están dispuestas a tomar en serio la situación actual, se pueden elaborar los procedimientos correspondientes.
Andrey Baklitsky, analista del Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú-MGIMO no confía en que la iniciativa tenga éxito.
«La oferta de no desplegar misiles 9M729 en el territorio europeo de Rusia ha sido discutida en círculos de expertos durante un tiempo, y ha sido expresada en ciertos puntos por legisladores alemanes y diplomáticos estadounidenses. Su aprobación como la postura oficial rusa es un buen paso hacia una posible regulación de la situación. Sin embargo, los miembros de la OTAN (excepto Francia) no han mostrado ningún interés práctico en el diálogo con Moscú sobre misiles de alcance intermedio en Europa», dijo el comentarista a Kommersant. «Hasta ahora, las capitales europeas se están haciendo eco de la posición de Estados Unidos y Washington no está hablando de diplomacia, sino de despliegue de misiles en Europa», agregó.