El expresidente de Bolivia Evo Morales dice que el Gobierno de EE.UU. tiene los ojos puestos en el petróleo venezolano para quedarse con él.
“El imperio inventa cualquier pretexto de decir que la dictadura, que no hay democracia, que no hay derechos humanos, cuento y más cuento, tratan de confundir al pueblo con estas clases de acusaciones para quedarse con sus recursos naturales”, ha manifestado el líder indígena en una entrevista realizada este domingo con el programa Aquí con Ernesto.
Asimismo, Morales ha hecho un llamado al pueblo venezolano para que luche por la patria, por la soberanía y la defensa de sus recursos naturales, advirtiendo, de nuevo, que lo que está en la mira de EE.UU. es el petróleo venezolano.
En esta misma línea, el depuesto presidente boliviano ha expresado su “respeto” a la nación bolivariana, que, con su unidad, ha frustrado los atentados e intervenciones de EE.UU. en su contra durante años.
Estas afirmaciones de Morales coinciden con las medidas adoptadas por la Administración estadounidense, que, en los últimos años, ha dictado varias sanciones contra el sector petrolero de Venezuela a fin de derrotar al Gobierno del legítimo mandatario del país, Nicolás Maduro.
Además, el expresidente boliviano ha hecho hincapié en sacar la doctrina norteamericana de la región, enfatizando que los países de América Latina necesitan crear y desarrollar, en el sector militar, una conciencia para que no se atente contra sus pueblos. “Esto es una lucha profunda que tenemos que dar todavía, y desde Estados Unidos intentarán dividirnos, no podemos entrar en el juego, hay que entrar en reflexión”, ha alertado.
De igual modo, ha asegurado que el Gobierno estadounidense, presidido por Donald Trump, mediante atentados y golpes de Estado contra gobiernos progresistas, como Bolivia o Venezuela, busca trofeos para sus elecciones. “A nosotros nos han sorprendido, quería dejarnos como trofeo para su reelección el señor Trump, pero fracasó”, ha concluido.
Washington y sus aliados, entre ellos Colombia, desde hace mucho tiempo han mostrado su oposición a los mandatarios de Bolivia y Venezuela, y han llevado a cabo varias maniobras para derrocarlos.
En el caso de Venezuela, la Casa Blanca reconoció al líder opositor venezolano Juan Guaidó como “presidente interino” y, con su complicidad, ha intentado varias veces, sin éxito alguno, eliminar a Maduro; llegó incluso a planear el secuestro y asesinato del mandatario venezolano.