Rusia ha sorprendido recientemente a muchos al ofrecer extender el Tratado New Start con los Estados Unidos por un año en lugar de cinco años y al expresar su disposición a suspender la acumulación de todas las ojivas nucleares durante el mismo período. Si Estados Unidos confirma su voluntad de aceptar la propuesta de Moscú de llegar a un acuerdo sin adiciones, Rusia estaría lista para comenzar a trabajar de inmediato en la formalización de dicho entendimiento, dijo el viceministro de Relaciones Exteriores Sergey Ryabkov, quien encabeza la delegación rusa en las conversaciones con los Estados Unidos sobre estabilidad estratégica, en entrevista con Kommersant.
«En esta etapa, no podemos decir que estemos al borde de [lograr] acuerdos», insistió el diplomático. «Tenemos que admitir que el grado de nuestras diferencias es muy grave, incluso en algunos puntos esenciales. Por eso, personalmente no veo ningún motivo para un optimismo particular», afirmó.
Al mismo tiempo, según Ryabkov, Rusia ya ha mostrado flexibilidad, y «ahora es el turno de Estados Unidos de tomar medidas recíprocas», incluida la demanda de Rusia de llegar a un acuerdo sin ningún tipo de anexos adicionales que podrían llevar el proceso a un callejón sin salida.
«Ahora, Washington tiene una oportunidad única de llegar a un acuerdo en los términos que se le ha ofrecido. Pero esto debería ser única y exclusivamente la extensión del Tratado New Start y la perspectiva de acordar el modelo de congelación de ojivas nucleares sin accesorios, y sin más complementos o demandas para Rusia», enfatizó, y señaló que «un rechazo eliminaría inmediatamente cualquier posibilidad de llegar a tal acuerdo».
«Permítanme enfatizar que la extensión del tratado en sí no es crítica desde nuestro punto de vista», señaló el diplomático, y agregó que la seguridad de Rusia puede garantizarse de manera confiable, incluso si Washington no apoya la extensión del acuerdo.