Brasil se ha convertido en el último campo de batalla en la guerra tecnológica de Estados Unidos contra Pekín, con la administración Trump ofreciendo al país sudamericano un lucrativo financiamiento para alejarse de Huawei de China al desarrollar sus redes 5G.
El martes, una delegación estadounidense encabezada por el asesor de seguridad nacional Robert O’Brien firmó un nuevo acuerdo con Brasil durante una visita de cuatro días al país. El acuerdo, patrocinado por el Export-Import Bank de Estados Unidos (EXIM), tiene como objetivo fortalecer la cooperación económica entre las dos partes y promover las exportaciones estadounidenses en varios sectores, especialmente en el área de telecomunicaciones y 5G, según O’Brien.
«Según el acuerdo, EXIM y Brasil acuerdan explorar e identificar oportunidades potenciales para el financiamiento de EXIM en un monto total agregado de hasta $ 1 mil millones», dijo EXIM en un comunicado.
Si bien la principal firma china de telecomunicaciones Huawei no se menciona directamente en el comunicado, los funcionarios estadounidenses dijeron que el dinero estaba destinado a financiar las compras de equipos de las empresas brasileñas a los rivales de Huawei.
La Embajada de China en Brasil se apresuró a denunciar la medida, acusando a Washington de buscar un «monopolio» de redes mientras lanzaba «ataques difamatorios» contra Huawei y su tecnología 5G.
Washington afirma que Huawei representa una amenaza para la seguridad nacional, acusando a la empresa de entregar datos de usuarios a Beijing. La firma china ha negado repetidamente los cargos. Estados Unidos incluyó a la compañía en la lista negra y trató de persuadir a sus aliados para que siguieran su ejemplo, especialmente cuando se trata del desarrollo de redes ultrarrápidas de próxima generación.
Brasil es una de las principales economías de América Latina y perder un mercado tan lucrativo podría ser otro gran golpe para Huawei. A principios de este año, el Reino Unido, que inicialmente no planeaba excluir a Huawei de su mercado, dijo que la empresa sería prohibida en sus redes 5G. El martes, Suecia se convirtió en el último país en decidir que Huawei no participe en su desarrollo 5G.
China es el mayor socio comercial de Brasil y representa la mayor parte de las exportaciones del país. Sin embargo, las relaciones entre las dos naciones se han vuelto más tensas desde que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, asumió el cargo en 2019. Se informó anteriormente que el presidente estaba considerando prohibir el uso de suministros de Huawei en la futura red 5G de Brasil.
China ha insinuado que la decisión de Brasil sobre Huawei podría tener un impacto en la reputación comercial de la nación. «Lo que está en juego es si un país puede establecer reglas de mercado basadas en la apertura, la imparcialidad y la no discriminación para todas las empresas», dijo el embajador de China en Brasil, Yang Wanming.