El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, denunció hoy ante la ONU el impacto de las medidas coercitivas unilaterales sobre el derecho fundamental de los pueblos a la alimentación.
Al intervenir en la Conferencia Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Arreaza instó al organismo multilateral a establecer una posición conjunta sobre estas acciones punitivas.
El jefe de la diplomacia venezolana hizo hincapié en las denominadas sanciones con afectaciones en la producción, transformación y comercialización de materias primas, alimentos, insumos agrícolas, así como tecnologías pertinentes para el desarrollo alimentario y de la agricultura.
En el caso del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Venezuela, este perjudica igualmente a naciones del Caribe que contaban con una herramienta fuerte para su desarrollo integral como el acuerdo de cooperación energética Petrocaribe.
El canciller venezolano abogó por la implementación de mecanismos para asegurar el acceso por igual de todos los países a las materias primas y fuentes de financiamiento necesarias para garantizar el derecho al crecimiento económico y la alimentación.
Al respecto, Arreaza saludó la presentación de la iniciativa Mano a Mano, dirigida a focalizar mayores recursos en los sectores más vulnerables; ‘Venezuela propondría que también se considere un Mano a Mano para los países sometidos a bloqueos y medidas coercitivas unilaterales’.
Durante su intervención, el titular puntualizó que la FAO trabaja en la nación sudamericana para mejorar la capacidad de producción de semillas, ámbito en el cual el Gobierno bolivariano promueve alianzas entre el sector científico y el productivo, señaló.
Destacó además la reciente aprobación de la Ley Antibloqueo, enfocada en promover la inversión en el país para reactivar la economía nacional, con prioridad en la producción y distribución de alimentos.