Estados Unidos tiene la intención de desplegar tres submarinos nucleares a 350 km de la frontera con Rusia. Así lo informó el canal de televisión noruego NRK.
Cabe señalar que la Armada de los Estados Unidos planea reutilizar la base secreta de submarinos subterráneos de la Guerra Fría «Olavsvern» en el norte del país. Está tallado en una montaña al nivel del mar cerca de la ciudad de Tromsø y se cerró en el 2002.
«Un acuerdo para reanudar su uso puede estar listo tan pronto como esta semana», dice el informe.
Los periodistas noruegos también señalan que el invierno pasado, Estados Unidos realizó ejercicios para desarrollar un intercambio limitado de ataques nucleares con Rusia. Según el escenario del ejercicio, la Federación de Rusia atacó un arma nuclear de bajo rendimiento en una instalación estadounidense en Europa, y se suponía que Estados Unidos debía responder.
El ejercicio tuvo lugar unas semanas después de que Estados Unidos desplegara una nueva ojiva submarina de bajo rendimiento, encargada por el presidente Donald Trump. La ojiva está destinada a contrarrestar las armas tácticas rusas y disuadir su uso.
Según algunos expertos, la decisión del Pentágono de instalar una nueva ojiva nuclear de bajo rendimiento W76-2 en sus misiles mostró a Moscú que Estados Unidos está listo para aceptar el desafío del Kremlin y responder a cualquier intento ruso con un ataque nuclear limitado en Europa para obligar a Occidente a rendirse.
Los submarinos estadounidenses de la clase Ohio que navegan frente a las costas de la Federación de Rusia ya están equipados con nuevas ojivas W76-2, lo que, según los expertos del canal, puso al Kremlin supuestamente muy nervioso.
Recordemos también que el verano pasado, la armada de la OTAN realizó un ejercicio en el Atlántico llamado “Dynamic Mongoose”, durante el cual las tripulaciones de la unidad aprendieron cómo combatir potenciales submarinos enemigos. Durante los ejercicios en la región islandesa, el destructor de la Armada estadounidense USS “Roosevelt”, así como otros cuatro barcos de superficie, se turnaron para cazar y evadir la persecución y los ataques de cinco submarinos estadounidenses.
“El objetivo más importante de estas operaciones es la lucha contra los submarinos. De hecho, estamos hablando principalmente de la búsqueda de submarinos rusos que abandonan sus bases en la península de Kola”, dijo Brian Clarke, investigador principal del Hudson Institute.
Durante la Guerra Fría, la frontera entre Feroe y Islandia jugó el papel de un cuello de botella a través del cual la flota soviética entró en el Atlántico. En el caso de que, en situación de combate, un submarino ruso logre atravesarlo, pondrá en peligro las comunicaciones entre Europa y Estados Unidos.
«Estados Unidos teme seriamente que, incluso si solo un par de submarinos nucleares rusos atraviesan la frontera entre las Islas Feroe e Islandia, podrán simplemente navegar por el Atlántico hasta que logren rastrear un submarino estadounidense con misiles balísticos a bordo o comiencen a amenazar la costa estadounidense», añadió Clarke.