Las consecuencias de la crisis provocada por la propagación del nuevo coronavirus para la economía mundial pueden ser más significativas de lo previsto, ya que la pandemia aún no ha terminado, dijo la economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) Gita Gopinath al presentar en la videoconferencia el informe de octubre de la organización.
Esta vez, los choques reales a gran escala, la pandemia y la crisis de salud bloquean esencialmente el sector de servicios en todo el mundo, así como la demanda del consumidor, lo que desalienta la inversión, dijo Gopinath, y agregó que la pandemia aún no ha terminado, lo que significa que sus consecuencias podrían ser incluso peores.
El FMI, enfatizó Gopinath, espera resultados positivos que también pueden ser posibles si se logra un progreso significativo en el sector de la salud. Por el momento, según sus previsiones, en la mayoría de los países, las tasas de crecimiento del PIB solo volverán a los indicadores que se veían antes de la pandemia para el 2022.
Se registró un brote de la enfermedad causada por la infección por coronavirus a fines de 2019 en China central y se extendió a la mayoría de los países. El 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud lo reconoció como una pandemia. Todos los países y territorios se vieron obligados a tomar diversas medidas sanitarias y epidemiológicas de emergencia, lo que provocó una profunda crisis económica internacional. Según las previsiones del FMI, este año la economía mundial registrará una caída significativa de casi un 4,4%, pero se recuperará y crecerá un 5,2% el próximo año.