El inspector general del Departamento de Justicia está llevando a cabo un sumario interno de las circunstancias que rodearon el cambio en las pautas de sentencia para el ex asesor del presidente estadounidense Donald Trump, Roger Stone. Esto fue informado el lunes por Reuters.
En febrero, estalló un escándalo en los Estados Unidos en torno al caso Stone. El 10 de febrero, la fiscalía estatal solicitó al tribunal que lo condenara a penas de prisión que iban desde siete años y tres meses hasta nueve años. Trump criticó esta recomendación. Al día siguiente, el Departamento de Justicia presentó una nueva moción solicitando que Stone fuera sentenciado a una pena de prisión más corta. Antes de eso, en medio de una decisión de revisar la recomendación, los cuatro fiscales federales que firmaron la primera petición se recusaron. La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, acusó al presidente de «interferencia política» y abuso de poder. El propio Trump niega su interferencia, alegando que no le pidió al Departamento de Justicia que cambiara su posición sobre el veredicto.
En junio, el fiscal adjunto de Maryland Aaron Zelinsky, que manejó el caso de Stone, dijo en una audiencia del Congreso de los Estados Unidos que el Departamento de Justicia presionó a los fiscales para que recomendaran una sentencia más leve para Stone.
Según NBC, fue el testimonio de Zelinsky lo que motivó la investigación.
Caso Stone
El ex asesor de Trump fue detenido en Fort Lauderdale (Florida) el 25 de enero del 2019. Los oficiales del fiscal especial Robert Mueller acusaron a Stone de intentar obtener materiales de piratas informáticos de WikiLeaks que podrían dañar a la rival de Trump en el 2016, la ex candidata demócrata Hillary Clinton.
En febrero, Stone fue sentenciado a tres años y cuatro meses de prisión por perjurio, por intentar obstruir una investigación del Congreso de Estados Unidos e intimidar a un testigo. El 14 de julio, se suponía que debía presentarse en la Oficina de Prisiones para cumplir su condena, pero el 10 de julio Trump firmó un decreto conmutando la sentencia, liberando a Stone de la necesidad de cumplir una sentencia de prisión, además de pagar el resto de la multa.
Las agencias de inteligencia estadounidenses acusaron a Rusia de supuestamente interferir en el proceso electoral estadounidense en el 2016. Durante casi dos años, el ex jefe del FBI, Mueller, ha estado investigando estos supuestos intentos de influencia. El 18 de abril del 2019, el Departamento de Justicia de Estados Unidos publicó su informe final, en el que el fiscal especial admitió que no había identificado la connivencia de Trump, que ganó las elecciones, con la Federación de Rusia. El propio Trump ha negado repetidamente las sospechas de contactos indebidos con funcionarios rusos durante la campaña presidencial. Moscú también calificó las acusaciones de intentos de influir en el curso de las elecciones estadounidenses como infundadas.