La reunión se produce en medio de un drama político que se desarrolla en Bielorrusia a raíz de una votación presidencial que provocó protestas masivas en el país cuando los oponentes de Lukashenko se negaron a reconocer su victoria. El presidente dijo en repetidas ocasiones que la situación en Bielorrusia se está desestabilizando desde el exterior.
Estamos en vivo desde la ciudad turística de Sochi, en el suroeste de Rusia, donde el presidente ruso Vladimir Putin está dando la bienvenida a su homólogo bielorruso, Alexander Lukashenko, para una reunión que marca su primera visita al país desde el estallido de protestas en Bielorrusia.
Se espera que los dos líderes discutan una amplia gama de temas, incluidos los relacionados con las relaciones bilaterales y la integración dentro del Estado de la Unión de Rusia y Bielorrusia, entre otros temas.
No menos importante, los dos jefes de estado discutirán la situación actual en Bielorrusia.
Bielorrusia ha estado envuelta en protestas desde principios de agosto, provocadas por el resultado de la votación presidencial, que la oposición denuncia, afirmando que su candidata Svetlana Tikhanovskaya ganó las elecciones. Si bien los resultados oficiales muestran que Lukashenko obtuvo más del 80% del apoyo del público, los rivales afirman que las encuestas a boca de urna indican que los resultados informados fueron tremendamente fraudulentos.
Desde el estallido de quejas, Putin y Lukashenko han mantenido una serie de conversaciones telefónicas en las que Putin acordó reunir una reserva de agentes de la ley que se desplegarán en Bielorrusia, si es necesario, en virtud de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva y el Tratado de Estado de la Unión.