Hoy, el canciller ruso Sergey Lavrov hizo una dura declaración contra Occidente, y en particular contra Alemania, debido a la situación en torno al «envenenamiento» del bloguero ruso y líder opositor Alexei Navalny.
En una entrevista con el canal de televisión RTVI, el jefe del departamento de política exterior de Rusia condenó las acciones de los socios occidentales, que exigen a Rusia una investigación inmediata sobre el envenenamiento y brindan información sobre los responsables.
Al mismo tiempo, las autoridades y departamentos alemanes se niegan a proporcionar la información necesaria para ello, simplemente ignorando todas las solicitudes de la parte rusa.
“Los socios occidentales de Moscú en el caso Navalny han ido más allá de toda decencia y límites razonables. Rusia no puede confiar en su palabra y abrir un caso penal sobre la situación con Navalny, no hay bases legales para esto”, dijo Sergey Lavrov.
Hizo hincapié en que, en este sentido, el gobierno de Moscú tiene todo el derecho a cuestionar la corrección y el profesionalismo de Occidente en relación con el caso de Navalny.
«Occidente habría ideado otra razón para las sanciones contra la Federación de Rusia, si no hubiera sido por el caso de Navalny», resumió el canciller.