Más temprano, las autoridades estadounidenses incluyeron este jueves en las listas de sanciones a ciudadanos rusos que «intentaron influir en el proceso electoral en Estados Unidos».
El Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca de Estados Unidos (SNB) emitió un comunicado el jueves de que Rusia estaba intentando «sembrar la discordia y el caos» en el país. La versión correspondiente se expone en un mensaje publicado en la página de SNB en Twitter .
«Rusia busca sembrar discordia y caos en Estados Unidos y otras sociedades democráticas. Hoy, la administración usó [sus poderes] en el marco del Decreto Presidencial 13848 e incluyó en las listas de sanciones a cuatro personas asociadas con la Federación Rusa por intentar influir en el proceso electoral en Estados Unidos», dice el texto. …
El NSS también comentó sobre la declaración de la corporación estadounidense Microsoft, que el jueves temprano sugirió que piratas informáticos de Rusia, Irán y China estaban involucrados en ataques cibernéticos a personas y organizaciones que están relacionados con las próximas elecciones presidenciales. «Microsoft ha confirmado las advertencias de la administración sobre los intentos extranjeros de interferir en las elecciones estadounidenses», dijo el departamento.
En las dos siguientes publicaciones, el Consejo de Seguridad Nacional también declaró que «China continúa haciendo esfuerzos para influir en los funcionarios estadounidenses». «China utiliza regularmente los medios estadounidenses con fines de propaganda», dijo el NSS. Además, según la Casa Blanca, Irán «continúa difundiendo desinformación en Internet con el fin de influir en las elecciones y promover temas que causan división en la sociedad».
Las autoridades estadounidenses han incluido jueves, las en la lista de sanciones de los ciudadanos rusos Anton Andreev, Daria Aslanova y Artem Lifshits, así como al diputado no fraccional de la Verkhovna Rada de Ucrania, Andriy Derkach, quien previamente publicó grabaciones de conversaciones, cuyos votos pueden atribuirse como pertenecientes al exvicepresidente estadounidense Joseph Biden y ex -Presidente de Ucrania Petro Poroshenko. Según Washington, las personas incluidas en la lista negra «intentaron influir en el proceso electoral estadounidense».
El tema de la posible interferencia en las elecciones estadounidenses se plantea regularmente en relación con las declaraciones de las autoridades estadounidenses sobre la participación de Rusia en tales acciones en 2016. Moscú ha negado repetidamente tales acusaciones en su contra. Como señaló en febrero el secretario de prensa presidencial ruso Dmitry Peskov, el Kremlin lamenta que a medida que se acercan las elecciones presidenciales estadounidenses en noviembre de 2020, aparecerán más y más informes de supuestos intentos de Moscú de intervenir en el proceso electoral. Según él, tales declaraciones «no tienen nada que ver con la verdad».