Venezuela ha advertido de la amenaza que suponen en su contra los presidentes de Estados Unidos, Colombia y Brasil: tienen planeada una guerra contra Caracas.
El embajador venezolano ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Samuel Moncada, denunció el sábado en su cuenta en Twitter los ejercicios militares conjuntos que EE.UU., Colombia y Brasil llevaron a cabo en el territorio colombiano pocos días después de que EE.UU. calificara a Venezuela de una amenaza.
“En enero 2020 se realizaron ejercicios militares conjuntos de EE.UU., Colombia y Brasil en Colombia. La fuerza multinacional practicó el asalto a ‘un aeródromo tomado por terroristas’. El embajador de EE.UU. señaló que la amenaza era Venezuela ¡Se preparan para la agresión!”, escribió Moncada.
El diplomático comentó que seis meses después, el presidente colombiano, Iván Duque, se reunió con Robert O’Brien, asesor de Seguridad Nacional del presidente de EE.UU., Donald Trump, y acordaron sobre más presiones contra Venezuela y también, el despliegue de las tropas norteamericanas en el territorio neogranadino, sin haber consultado con el Congreso de este país.
“El desespero por cumplir con el plan de Trump lleva a Duque a violar la Constitución. Así permite el regreso de tropas de EE.UU. sin la necesaria autorización del Congreso. En agosto se decidió que la máxima presión contra Venezuela arrancaba en septiembre”, recalcó Moncada.
El representante venezolano indicó además que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, participó en los ejercicios militares de enero con Colombia y EE.UU., acordó en marzo de 2020 con Trump para ayudar en su campaña contra Venezuela e informó de la “Operación Amazonía” que Brasil realizaría en septiembre
Moncada cuestionó que esta iniciativa no puede ser una casualidad y aseguró que forma parte del plan de Trump, a quien lo calificó del peor presidente de EE.UU. en 50 años y un peligro no solo para Venezuela, sino para todo el mundo y su pueblo.
“La propaganda de guerra está activada en Washington, Miami y Bogotá. Sus agentes se apresuran a saturar a los medios con fabricaciones que abran caminos a la agresión contra el pueblo venezolano”, alertó.
Las tensiones entre Washington y Caracas han ido escalando. La Administración de Trump, con el fin de derrocar al Gobierno venezolano, presidido por Nicolás Maduro, respaldó firmemente al golpista Juan Guaidó, ha impuesto una serie de sanciones a Venezuela, y hasta ha ofrecido 15 millones de dólares por cualquier información que facilite la detención del mandatario chavista.
Asimismo, las relaciones de Venezuela y Colombia se han deteriorado en los últimos años de manera considerable, por la decisión de Bogotá de secundar a Washington y reconocer al golpista Juan Guaidó.
Las tensiones se avivaron aún más el pasado 3 de mayo, cuando el Gobierno venezolano denunció haber desarticulado un intento de ataque terrorista vía marítima, planeado por Trump, con la complicidad de su homólogo colombiano, Iván Duque, para “asesinar” a Maduro.
Con Brasil también se han endurecido las relaciones diplomáticas tras la asunción de Jair Bolsonaro, quien califica a Maduro de dictador. En noviembre pasado se vivieron momentos tensos cuando un grupo de venezolanos opositores intentó sin éxito tomar la sede de la embajada venezolana en Brasilia.