La colocación de coronas de flores en el Monumento a los Pilotos Aliados se llevó a cabo el jueves en Nanjing (provincia de Jiangsu, en el este de China) en memoria de los pilotos voluntarios soviéticos que ayudaron al pueblo chino a luchar contra los invasores japoneses. A la ceremonia asistieron diplomáticos de los consulados generales de Rusia y Bielorrusia en Shanghái, así como representantes de las autoridades locales.
Como se dijo en el Consulado General de Rusia en Shanghái, antes de la ceremonia, los niños chinos leyeron poemas sobre la paz frente al monumento. La colocación de coronas de flores en este monumento es un evento habitual que coincide con las celebraciones del Día de la Victoria, pero este año la ceremonia tuvo que posponerse debido a la pandemia de coronavirus.
«Este año, Rusia y China celebran el 75° aniversario de la Victoria de nuestros pueblos en la Gran Guerra Patriótica y la Guerra de Resistencia a los Invasores Japoneses. En su esencia y significado histórico mundial, estos son eventos clave en los frentes clave de la gran guerra: Europa y el Lejano Oriente. Los pueblos Soviético y Chino rompieron el yugo de los agresores fascistas, sentando así una base sólida para el desarrollo pacífico de la posguerra», dijo el Cónsul General de la Federación Rusa en Shanghái, Alexander Shmanevsky.
Según el diplomático, en esta brutal guerra, la URSS y China, a costa de enormes pérdidas, defendieron el derecho al desarrollo pacífico para ellos y otros pueblos, estableciendo una profunda amistad mutua. «El recuerdo del acto heroico del Ejército Soviético en Europa y Manchuria permanecerá para siempre en el corazón del pueblo chino», dijo.
El Monumento al Piloto de Guerra de Nanjing es uno de los lugares de descanso más grandes del país para los pilotos de la Fuerza Aérea China y los pilotos voluntarios extranjeros que participaron en la Guerra Sino-Japonesa (1937-1945). Los nombres de 3.304 militares chinos, estadounidenses y soviéticos están grabados en él. 236 nombres pertenecen a soldados soviéticos que murieron en batallas contra los invasores japoneses en el período de 1937 a 1939.
Después de la invasión de los militaristas japoneses en China, la Unión Soviética fue una de las primeras en acudir en ayuda del pueblo chino. A China se le otorgó un préstamo de 250 millones de dólares, lo que permitió la entrega de armas y los equipos más avanzados en ese momento en el menor tiempo posible. Los pilotos voluntarios soviéticos jugaron un papel especial en esta asistencia, que obtuvieron victorias en las batallas contra la Fuerza Aérea Japonesa. En las hostilidades en China entre 1937-1940 participaron más de 5 mil ciudadanos soviéticos.