Cientos de personas se reunieron en las calles de Beirut para protestar por el nombramiento de Mustapha Adib como nuevo primer ministro del Líbano. Los manifestantes se encontraron con gases lacrimógenos y vehículos blindados.
Los enfrentamientos tuvieron lugar el mismo día en que el presidente francés, Emmanuel Macron, realizó su segunda visita a la ciudad en un mes para verificar el progreso de la reforma.
Los manifestantes expresaron su preocupación por el nombramiento de Adib como jefe del gobierno de la nación, alegando que no era lo suficientemente radical como para cambiar la estructura política del país.
En una entrevista, Macron destacó el fracaso de los manifestantes en producir un líder con el potencial de hacerse cargo del gobierno, luego de que el primer ministro Hassan Diab renunciara y destituyera su gabinete después de la reciente gran explosión en Beirut que mató a casi 200 personas.
Las fuerzas policiales desplegaron vehículos blindados de estilo militar para dispersar a las multitudes y utilizaron gases lacrimógenos mientras los manifestantes les lanzaban proyectiles.
Las protestas contra el gobierno del Líbano se han desatado desde octubre del año pasado, pero se desaceleraron durante la pandemia de Covid-19, solo para reanudarse después de la mortal explosión en el puerto de Beirut. La explosión fue causada por nitrato de amonio químico, que había estado almacenado allí durante años sin las debidas precauciones de seguridad.
A raíz de la explosión, los manifestantes se enfrentaron con las fuerzas policiales, provocaron incendios e incluso intentaron asaltar edificios del ministerio del gobierno.