Horas antes, el portavoz del gobierno alemán Steffen Seibert afirmó que las pruebas mostraron que la figura de la oposición rusa Alexei Navalny fue envenenada por un agente nervioso del grupo Novichok.
Estados Unidos está profundamente preocupado por el supuesto envenenamiento de Navalny y trabajará con sus aliados para «responsabilizar a Rusia», se lee en un comunicado de la Casa Blanca.
Mientras tanto, Naciones Unidas dijo que en este momento no está en condiciones de comentar sobre el supuesto envenenamiento de Alexei Navalny.
Esto se produce después de que el portavoz del gobierno alemán, Steffen Seibert, emitiera un comunicado el miércoles, en el que afirma que, a petición de la clínica Charite en Berlín, un laboratorio de la Bundeswehr realizó una prueba de toxicología en las muestras de Navalny. «Proporcionó evidencia innegable de un agente químico nervioso del grupo Novichok», se lee en el comunicado.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que Berlín ha estado tratando el caso de Navalny como «intento de asesinato por envenenamiento» y está esperando que Rusia explique su posición y proporcione respuestas.
Al comentar sobre estas acusaciones, el Kremlin reiteró el miércoles que las pruebas realizadas a Navalny en un hospital de Omsk no encontraron sustancias tóxicas en su sistema.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia enfatizó que el llamamiento de Berlín a la UE, la OTAN y la OPAQ sobre el caso Navalny es necesario para justificar «medidas de respuesta» preestablecidas. El ministerio destacó que si el verdadero objetivo de Berlín es una investigación, es necesario volver a un marco legal.