Alberto Fernández de Argentina anuncia la reestructuración del 99% de la deuda con los acreedores


«El país tendrá un alivio de la deuda en la próxima década de 37.700 millones de dólares», anunció el ministro de Economía.

El ministro de Economía de Argentina, Martín Guzmán, confirmó este lunes la clausura del proceso de reestructuración de la deuda de la nación con acreedores privados, donde se tuvo una adhesión del 99 por ciento.

En una reunión suscitada en Casa Rosa, junto con el presidente Alberto Fernández, el ministro señaló que desde el día uno, el Ejecutivo emprendió varias estrategias para llegar a un acuerdo con los privados, «fruto del proceso de diálogo, el 99 por ciento de la deuda pública bajo moneda extranjera ha quedado reestructurada, se condice con una adhesión del 93,5 por ciento», agregó.

«Este acuerdo pone a la Argentina en una posición más sana y sólida (…) el país tendrá un alivio de la deuda en la próxima década de 37.700 millones de dólares y la tasa de interés baja del 7 a 3,07 por ciento», indicó el ministro Guzmán.

Asimismo, señaló que el alivio en la tasa de interés permite que el sector público implemente políticas para propiciar el desarrollo de la nación, «nos da un respiro en los próximos diez años, donde podemos implementar políticas para el mejoramiento de la salud y educación», aseveró.

Por su parte, el jefe de Estado instó a los argentinos a no olvidar el nivel de deuda que dejó el Gobierno anterior presidido por Mauricio Macri, «no quiero que esto nos pase más. Pido que grabemos en la memoria aquello que nos duele para que nunca más nos vuelva a doler», sentenció.

Desde el pasado 4 de agosto, el Ejecutivo anunció mediante el Ministerio de Economía un acuerdo por el canje de la deudas con tres grupos de acreedores de bonos bajo legislación extranjera por más de 66.000 millones de dólares. Por ello, el Gobierno emitió 13 bonos en dólares y euros con caducación para los años de 2028 y 2046.

Los bonos emitidos se intercambiarán por los 21 títulos argentinos en circulación elegidos para la operación. Con este método el presidente Fernández logró postergar el vencimiento entre 2020 y 2024 por un total de 63.664 millones de dólares.

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