El asesinato por parte de Estados Unidos del alto general iraní Qasem Soleimani a principios de enero exacerbó las ya tensas relaciones entre Teherán y Washington desde la retirada unilateral de la administración Trump del acuerdo nuclear con Irán de 2015 en 2018.
El subdirector general del centro de investigación ruso Rezonans Alexander Stuchilin ha argumentado que un sistema de radar producido por su compañía ayudó al ejército iraní a rastrear a los cazas furtivos F-35 estadounidenses tras la muerte de un alto general iraní en un ataque con drones estadounidenses a principios de este año.
«A principios de 2020, este sistema [Rezonans-NE] identificó los F-35 estadounidenses y los rastreó constantemente», dijo Stuchilin al margen del foro técnico y militar Army-2020 en las afueras de Moscú a principios de esta semana.
Se refirió a los «hechos bien conocidos» que tuvieron lugar a principios de año, en un aparente guiño al asesinato de Qasem Soleimani, jefe del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI), la Fuerza Quds de élite.
“Gracias a que el personal del sistema de radar transmitía abiertamente información, incluso relacionada con las rutas de los vuelos del F-35, el oponente no cometió acciones irreparables que pudieran haber provocado una gran guerra”, enfatizó Stuchilin.
El jefe de Rezonans agregó que el radar ha estado en constante servicio de combate en Irán durante varios años. Ni los funcionarios rusos ni estadounidenses aún no han comentado sobre la declaración de Stuchilin.
Tensiones entre Estados Unidos e Irán
Soleimani y el alto comandante de la milicia iraquí Abu Mahdi al-Muhandis murieron en un ataque con un dron estadounidense contra su automóvil en el aeropuerto internacional de Bagdad el 3 de enero, en un ataque autorizado por el presidente Donald Trump.
Esto resultó en una gran escalada de tensiones entre Teherán y Washington, con Irán respondiendo oficialmente lanzando ataques aéreos contra dos bases militares iraquíes que albergan tropas estadounidenses
Los ataques no causaron muertos ni heridos graves, pero el Pentágono ha informado desde entonces que al menos 109 militares estadounidenses han sido diagnosticados con lesiones cerebrales traumáticas.
Las tensiones entre Estados Unidos e Irán han persistido desde el 8 de mayo de 2018, cuando el presidente Trump anunció la salida unilateral de la nación del acuerdo nuclear con Irán de 2015, también conocido como el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA), que también restableció duras sanciones económicas contra Teherán. Exactamente un año después, Teherán declaró que comenzaría a suspender algunos de sus compromisos clave del JCPOA.