A diferencia de las organizaciones europeas, Rusia no está tratando de influir en la situación política en Bielorrusia, dijo a Izvestia el senador ruso Konstantin Kosachev, comentando las recientes acusaciones de varios miembros del Parlamento Europeo (PE) contra Moscú formuladas durante una sesión de la Comisión de Relaciones Exteriores. La candidata de la oposición bielorrusa, Svetlana Tikhanovskaya, participó en la sesión e informó a los miembros del PE sobre los objetivos del movimiento de protesta bielorruso y su disposición a iniciar conversaciones con el actual presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko.
Los legisladores europeos expresaron su apoyo a la lider de la oposición bielorrusa y proporcionaron sus evaluaciones de la situación en la república. Los parlamentarios europeos a menudo mencionaron a Rusia en sus declaraciones, algunos ofrecieron establecer un diálogo con Moscú sobre Bielorrusia y algunos lo acusaron de ayudar al gobierno actual y enviar a sus agentes para influir en la situación allí.
Los políticos rusos descartaron esas afirmaciones como absurdas y señalaron que Europa es la que se está entrometiendo en los asuntos internos de Bielorrusia.
«Respetamos la soberanía de Bielorrusia, no realizamos reuniones, ya sea con representantes del gobierno o de la oposición», dijo a Izvestia el presidente del Comité de Asuntos Exteriores del Consejo de la Federación Rusa (la cámara alta del parlamento), Konstantin Kosachev. «Sin embargo, siempre estamos dispuestos a brindar cooperación en el diálogo interno, si Bielorrusia lo necesita. Rusia no está haciendo ningún intento de impulsar la situación en ninguna dirección», insistió el senador. Sin embargo, la postura oficial de Rusia se reduce a mantener contactos con el liderazgo oficial de Bielorrusia representado por Alexander Lukashenko y sus seguidores, agregó.