«La política de máxima presión de Washington sobre Irán ha fracasado en un 100% … Si Washington quiere un acuerdo con nosotros, entonces deberían disculparse por salir del acuerdo y volver a él», dijo Rouhani en una conferencia de prensa televisada.
Las tensas relaciones entre los dos adversarios casi han llegado a los golpes desde 2018, cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, abandonó el acuerdo alcanzado por su predecesor, Barack Obama, y volvió a imponer sanciones que paralizaron la economía iraní.
En respuesta a lo que Washington llama su campaña de «máxima presión» para obligar a Irán a negociar un nuevo acuerdo, Teherán ha violado los límites clave a la actividad nuclear impuestos por el acuerdo de 2015, según el cual la República Islámica aceptó restricciones a su programa de enriquecimiento de uranio a cambio de alivio de las sanciones.
Trump se ha comprometido a llegar a un nuevo acuerdo, bajo el cual buscaría límites más estrictos al enriquecimiento, el fin del programa de misiles balísticos de Teherán y la participación en varios conflictos de Oriente Medio, en semanas si gana la reelección en noviembre.
«Trump ha estado hablando mucho … El próximo presidente, ya sea Trump u otra persona, debe adoptar un enfoque diferente hacia Irán», dijo Rouhani.
En respuesta a las sanciones de Estados Unidos, Teherán violó los límites clave a la actividad nuclear impuestos por el acuerdo de 2015.
La semana pasada, Estados Unidos se movió para restablecer las sanciones globales de la ONU a Irán, incluido un embargo de armas, argumentando que Teherán violaba el acuerdo nuclear de 2015 a pesar de que el propio Washington abandonó ese acuerdo hace dos años.
Los miembros del consejo Francia, Reino Unido y Alemania (E3), que junto con Rusia y China permanecen en el acuerdo, han descartado la medida como nula dada la salida de Washington del acuerdo y dijeron que estaba perjudicando los esfuerzos para restringir la actividad nuclear de Irán.
Pero el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, haciéndose eco de la postura de Gran Bretaña y Alemania, dijo a su homólogo iraní que a París le preocupaba el impacto del embargo de armas que expiraba en octubre.
«El ministro reiteró nuestra preocupación por las actividades desestabilizadoras de Irán y las consecuencias de la expiración del … embargo de armas convencionales, y le informó sobre la determinación del E3 de buscar soluciones que preserven la seguridad y la estabilidad regional», dijo el portavoz adjunto del ministerio, Francois Delmas.
El primer ministro Benjamin Netanyahu de Israel, archienemigo de Irán en el Medio Oriente, instó a Gran Bretaña a unirse al intento de Estados Unidos de volver a imponer las sanciones de la ONU durante una visita del secretario de Relaciones Exteriores británico, Dominic Raab, a Jerusalén.
“Mire la agresión de Irán hoy, sin un arma nuclear. Qué gran peligro sería Irán para el mundo entero si consiguiera un arma nuclear ”, dijo Netanyahu a Raab, según un comunicado emitido por la oficina del primer ministro.
Irán ha negado repetidamente buscar armas nucleares.