Los científicos rusos han creado una tecnología que permitirá cambiar la estructura del hielo y construir sitios de despegue y aterrizaje a partir de él en el Ártico.
Los aeródromos de hielo proporcionarán pistas a los aviones para diversos fines, que tanto faltaban en esas partes. Así lo dijo uno de los directores de proyectos de economía e innovación de la Universidad Técnica Estatal de Moscú Bauman, Evgeny Storozhuk.
El Ministerio de Defensa de la Federación de Rusia también participó en el proyecto, denominado «Ploshchadka» (“Plataforma”).
Esto se debe al hecho de que la presencia de aeródromos en el Ártico puede desempeñar un papel importante en el éxito de nuestra presencia en el Ártico.
Como saben, hay una lucha incesante por controlarlo. Y el que tenga más oportunidades de conquistarlo ganará.
El hielo se modificará con reactivos químicos, lo que evitará su fusión o destrucción. Además, en él se colocarán sensores de fibra óptica que, si pasa algo, avisarán de los más mínimos cambios en el estado del hielo. Esto será monitoreado de forma remota por el operador del sistema.
Es de destacar que la tecnología desarrollada permite construir aeródromos en poco tiempo. También estamos hablando de la creación de aviones y cámaras de almacenamiento para artículos grandes con su ayuda.
Es difícil imaginar cómo se hará todo esto, pero definitivamente nos lo dirán. Sin embargo, estas innovaciones ya son impresionantes. Todos sabemos cómo son los museos de hielo, pero aquí hay algo que se aplicará a este nivel. No es de extrañar que el Ministerio de Defensa se interesó por el proyecto.
En un futuro próximo, los aeródromos de hielo rusos podrán llevar sobre sus «hombros» aviones de transporte militar tan potentes y pesados como el Il-76 y muchos otros.
Eva Ivanova.