Se profundizan los temores nuevos incendios forestales en California mientras Trump ofrece apoyo federal


Una ola de calor masiva y la caída de rayos han causado incendios forestales que devastan California, golpean la parte central del estado y queman cientos de miles de acres.

El clima cambiante generó preocupaciones el domingo por los nuevos incendios que estallaron en California durante la noche y los funcionarios estatales y locales advirtieron a los residentes que se preparen para evacuar sus hogares.

«No hay un sentimiento de optimismo puro, sino un sentimiento de determinación, un sentimiento de que tenemos recursos que nos respaldan», dijo el supervisor del condado de Sonoma, James Gore.

Los bomberos han estado luchando contra tres «complejos» de incendios resultantes de fuertes vientos, temperaturas y relámpagos en el norte de California.

El progreso fue constante el sábado, con un buen clima que ayudó a los esfuerzos de los bomberos a pesar de los cielos humeantes que impidieron que los aviones que arrojaban agua volaran a baja altura. Las órdenes de evacuación se levantaron en algunas áreas cuando llegaron refuerzos para ayudar a los abrumados militares.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, emitió una declaración de desastre el sábado y ofreció asistencia federal. El gobernador Gavin Newsom dijo que el apoyo brindará asesoramiento en caso de crisis, vivienda y otros servicios sociales a quienes se encuentren en las áreas afectadas.

Los bomberos han estado luchando durante toda la semana para abordar los dos grupos más grandes de incendios cerca del área de la Bahía de San Francisco debido a la escasez de recursos.

“Todos nuestros recursos permanecen extendidos a una capacidad que no hemos visto en la historia reciente”, dijo Shana Jones, jefa de unidad de CalFire en Sonoma-Lake-Napa.
El incendio en la región vinícola de California tenía solo 1.400 bomberos asignados. Una disminución significativa en la mano de obra en comparación con los 5,000 que combatieron el incendio en Mendocino en 2018, el más grande en la historia del estado.

Hasta ahora, se han quemado 1,120 millas cuadradas, luego de emerger de tres grupos de incendios que se extendieron por el bosque y las áreas rurales en y alrededor del Área de la Bahía de San Francisco.

Las secuoyas antiguas en el parque estatal más antiguo de California, Big Basin Redwoods, y la sede del parque y los campamentos han sido víctimas del incendio. Las personas también se vieron obligadas a permanecer en el interior debido al humo que hizo que la calidad del aire se volviera peligrosa.

Hasta el momento, cinco personas han muerto como resultado de los incendios, con 700 casas y otros edificios destruidos, mientras que decenas de miles han huido de sus hogares.

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