El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ignoró las llamadas telefónicas de colegas extranjeros antes de trasladar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén. Este reconocimiento lo hizo el viernes el jefe de la administración estadounidense.
Confirmó que varios otros países han ejercido una presión significativa sobre Estados Unidos para lograr que Washington abandone los planes de reubicar la embajada estadounidense en Israel. «La presión de otras partes del mundo fue tremenda», dijo Trump. Habló en el suburbio de Arlington, Virginia, en Washington, ante miembros del Consejo de Política Nacional, una organización no gubernamental estadounidense conservadora.
«Dije varias veces que [en algún momento] simplemente apagué mi teléfono. Y luego el rey llama, luego esto, luego esto: «Estamos aquí por Israel». Dije: «Transmítales que le llamaré en un par de días , <…> Estaré la semana que viene. Reyes, reinas, primeros ministros, presidentes, dictadores-todos gritaron: «¡No lo hagas, no lo hagas! ¡Habrá derramamiento de sangre en todo el Medio Oriente!»— dijo el ocupante de la Casa Blanca. Desde su punto de vista, el gobierno estadounidense hizo lo correcto, sin escuchar tales recomendaciones. «Miren lo que acabamos de lograr con los Emiratos Árabes Unidos e Israel», insistió Trump en vista del acuerdo sobre la normalización de relaciones entre Emiratos Árabes Unidos e Israel, que se alcanzó el otro día con la mediación activa de Estados Unidos.
«Así que contuve la respiración y lo hice (es decir, reconocí a Jerusalén como la capital de Israel y trasladé la embajada estadounidense allí). ¿Y saben qué pasó? Nada. Simplemente hicimos lo que deberíamos haber hecho hace muchas décadas. Y todos los presidentes [de Estados Unidos] han roto su promesa de campaña [de trasladar la embajada] excepto yo”, dijo Trump.
Según él, posteriormente llamó a sus colegas extranjeros, con quienes quería evitar el contacto antes de trasladar la embajada. «Luego llamé a estos jefes de estado, muchos de los cuales son mis amigos. <…> Y algunos de ellos usan demasiado nuestro país, incluidos algunos de nuestros supuestos aliados. Algunos de ellos son los peores porque nos explotan», agregó el presidente de Estados Unidos. En su opinión, a veces es más fácil y correcto ignorar tales llamadas de colegas extranjeros que escuchar «una y otra vez» sus llamadas para no actuar de una forma u otra.
Estados Unidos trasladó su embajada a Jerusalén en el 2018. Mientras tanto, Palestina considera la parte oriental de Jerusalén como su capital. Luego, en el 2019, Estados Unidos reconoció la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán, que pertenecían a Siria y fueron capturados en la Guerra de los Seis Días de 1967. Este paso fue condenado casi por unanimidad por la comunidad internacional.