El Representante Permanente de Siria en la ONU, el Embajador Bashar al-Jaafari, pidió al Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, que intervenga de inmediato y haga todos sus esfuerzos para detener el crimen del régimen turco de cortar el agua potable a casi un millón de ciudadanos sirios en la provincia siria de Hasaka y sus suburbios.
La solicitud de Al-Jaafari se produjo durante una llamada telefónica con el Secretario General de la ONU el viernes para informarle sobre las condiciones catastróficas en la ciudad de Hasaka y sus suburbios debido al corte de agua potable, destacando que la práctica agresiva turca constituye un crimen de guerra y un crimen contra la humanidad.
Al-Jaafari señaló el uso del agua por parte de las fuerzas de ocupación turcas como arma contra la población civil al privar a más de un millón de civiles en la ciudad de Hasaka y sus suburbios de agua potable, ya que la ocupación turca cortó deliberada y repetidamente el agua de la estación de Allouk y los pozos que los alimentan más de 15 veces durante varios días, utilizando esta táctica para castigar al pueblo de Hasaka por su apoyo al gobierno sirio y su rechazo a la ocupación turca.
Dijo que la situación provocada por este crimen es insoportable, particularmente por el calor y la amenaza de la pandemia del Coronavirus, recordando a Guterres las cartas oficiales dirigidas a él y al Consejo de Seguridad al respecto, incluida la denuncia de fecha 31/05/2020, así como las declaraciones de Siria en el Consejo de Seguridad sobre este asunto, la más reciente fue hecha el 19 de agosto, con al-Jaafari diciendo que Siria espera que el Secretarío General reaccione a estas cartas con urgencia.
Por su parte, Guterres dijo que está al tanto de la situación en la provincia de Hasaka y que ha encargado al equipo de la ONU en Siria y a su Enviado Especial Geir Pedersen que tomen las medidas necesarias para abordar este asunto, resolverlo con urgencia y entregar ayuda humanitaria a personas afectadas hasta que la estación de Allouk vuelva a estar operativa.
Dijo que podía imaginar la situación a la luz del intenso calor y la ausencia de agua potable, y agregó que esta situación debe resolverse de manera urgente, y que hará sus mejores esfuerzos contactando al gobierno turco y otras partes para presionar y resolver. este asunto lo antes posible.
Guterres también dijo que encargará a Pedersen que aborde este asunto al reunirse con los representantes de Estados Unidos, Rusia y Turquía en Ginebra el lunes en el marco de las reuniones del comité para discutir la constitución.