Mientras Washington critica a otros gobiernos por el control violento de disturbios, Tennessee ha tomado medidas drásticas después de meses de protestas contra la brutalidad policial y el racismo.
Según The Hill, el gobernador William Lee ha firmado una legislación para aumentar las penas para ciertos tipos de protestas. Es de destacar que la aprobación de la nueva legislación se realizó sin publicidad.
Ahora es ilegal en el estado realizar mítines en los campamentos en terrenos municipales. La violación de esta prohibición equivale a un delito grave de clase E y se castiga con hasta 6 años de prisión. Además, los culpables de un delito, según la ley estatal, pierden su derecho a votar en las elecciones.
La Asamblea General de Tennessee votó a favor de la prohibición después de meses de protestas contra el racismo y la tiranía por parte de las fuerzas de seguridad frente al edificio de la administración estatal. Las manifestaciones aquí comenzaron después de que un policía de Minneapolis mató a George Floyd, durante su arresto.