La última parte del informe del Senado de Estados Unidos, dedicada al tema de la presunta injerencia de la Federación de Rusia en las elecciones presidenciales estadounidenses, no contiene hechos reales y carece absolutamente de fundamento, dijo la representante oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zakharova.
El Comité del Senado de Estados Unidos publicó a principios de esta semana la última parte de un informe que acusa a Rusia de inmiscuirse en las elecciones del 2016, lo que Moscú niega con vehemencia.
«Al igual que las secciones del informe publicadas anteriormente, la última parte no contiene hechos ni pruebas reales. De hecho, se trata de un conocido conjunto de acusaciones infundadas que habían aparecido anteriormente en el «Informe Muller» y otros documentos estadounidenses, incluido sobre el hackeo presuntamente en nombre de la dirección rusa de los servidores del Partido Demócrata, sobre los contactos de representantes de la sede de Donald Trump con ciudadanos rusos, sobre el deseo de Rusia socavar la democracia en Estados Unidos, etc», — dijo en un comentario Zakharova, publicado en el sitio web del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.
Según la diplomática, Moscú ha comentado repetidamente estas afirmaciones, señalando su «naturaleza absolutamente sin fundamento». Como señaló Zakharova, hoy parece obvio que toda la historia de la intervención rusa fue originalmente «inventada en el curso de la lucha política interna entre varias fuerzas en los Estados Unidos».
«Por nuestra parte, solo podemos lamentar que debido a sus ambiciones y deseo de despertar los sentimientos rusofóbicos, se causó un daño grave al diálogo bilateral. No creemos que apostar por una mayor implantación de los mitos antirrusos en la sociedad traerá éxito a nadie. Hoy, los ciudadanos estadounidenses están preocupados por los demás problemas reales, y no ficticios, y se espera que los políticos los resuelvan eficazmente. Esperamos que los senadores estadounidenses se den cuenta de ello a su debido tiempo», dijo Zakharova.
Rusia ha negado repetidamente las acusaciones de intentos de influir en los procesos democráticos en diferentes países, y el secretario de prensa del presidente ruso, Dimitri Peskov, las calificó de «absolutamente infundadas». El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, dijo que no hay evidencia que respalde esto.