A última hora del 20 de agosto, estallaron fuertes enfrentamientos entre los extremistas respaldados por Turquía en la ciudad ocupada de Ras al-Ain en el campo norte de la provincia siria de Hasaka.
Los extremistas de la facción local del Escudo de Hasaka atacaron a combatientes tribales de la tribu al-Mualli, que está aliada de la División Hamza. Un desacuerdo sobre la gestión del paso fronterizo de Ras al-Ain con Turquía estaba detrás del nuevo conflicto.
A principios de esta semana, las autoridades turcas designaron a Ahmad Bulat, hermano de Saif Abu Baker, máximo líder de la División Hamaz, como cabecilla del cruce fronterizo de Ras al-Ain.
La decisión provocó una reacción violenta del consejo local de Ras al-Ain. El consejo suspendió su trabajo para protestar contra el nombramiento de Bulat, un extremista del campo del norte de Alepo, en el lugar de un civil local.
«Tres murieron y cinco resultaron heridos de ambos lados [en los enfrentamientos de Ras al-Ain]«, dijo en un informe el Observatorio Sirio de Derechos Humanos con sede en Londres.
La situación en Ras al-Ain ahora está en calma. Sin embargo, un nuevo enfrentamiento militar podría estallar en cualquier momento ya que el problema del cruce aún no se ha resuelto.
Turquía está trabajando para afirmar su dominio sobre las áreas ocupadas por sus fuerzas en el norte y noreste de Siria. Contrariamente a sus declaraciones públicas, Ankara parece estar planeando una presencia militar permanente en Siria.