Los medios checos informaron sobre la detención de un empleado de la embajada rusa en Praga, fue acusado de supuesta compra ilegal de cartuchos de fusil.
Un ciudadano ruso fue detenido en junio en la ciudad de Ricany, cerca de Praga.
«El 25 de junio, la policía detuvo a un hombre mientras compraba ilegalmente cartuchos Lapua finlandeses para rifles de francotirador y otras municiones», informó la Radio Checa.
Se señala que un empleado de la sección militar de la embajada rusa en la República Checa presentó su pasaporte diplomático, tras lo cual fue liberado por la policía checa. Pronto, el ciudadano de la Federación de Rusia abandonó la República Checa, los cartuchos fueron confiscados.
El Ministerio de Relaciones Exteriores checo no comenta sobre esta información.